"La guerra es la forma de conflicto socio-político más grave entre dos o más grupos humanos" Wikipedia.
Esta sería la forma más simple de definir la guerra. Pero hay mucho detrás. Pase lo que pase, en una guerra siempre se pierde. Primero, lo más importante, la vida. Siempre hay vidas perdidas, de una parte y de otra. También se puede perder la humanidad, la cordura, la sensibilidad hacia otro ser humano, las ganas de vivir... Luego ya, por otro lado, están las perdidas materiales, y lo que viene tras la guerra: familias destrozadas, pobreza, hambrunas...
Chechenia en ruinas
En esta historia, vemos la guerra desde el punto de vista de Yegor. Miembro de las fuerzas especiales del ejército ruso. Este es enviado a Chechenia para luchar contra los rebeldes chechenos -vamos, una invasión en toda regla-. El protagonista nos cuenta de primera mano todo lo que pasa desde el momento en que pisa Chechenia ( que formaba parte de la unión soviética, pero tras su desaparición fue declarada independiente. Por eso, durante la guerra chechena en la década de los noventa, Rusia intenta hacerse con esta luchando contra los rebeldes opositores).Entre asedios, misiones y ratos de "relax"; Yegor nos habla sobre lo que más echa de menos desde que llegó: su amante Dasha y a su perra Daisy. También nos habla de su padre, ya fallecido. Nos va contando anécdotas y detalles pasados.
El relato con el que me encontré es estremecedor. Prilepin no se corta a la hora de hablar de las ejecuciones, de los muertos; de como las balas rompen huesos, cabezas y ojos; de la tensión que se palpa en el ambiente; del miedo que paraliza. Nos muestra que la guerra es imprevisible: puedes estar tranquilamente defendiendo una posición, y al segundo, puedes estar siendo avasallado por cientos de balas que buscan dar en el blanco. Todo es azar y suerte. Cada paso que das puede ser el último. En el momento del enfrentamiento puedes matar o que te maten; también tienes la opción de escapar, pero es peligroso. Prácticamente no tienes escapatoria una vez metido en el ajo.
Soldados rusos en Chechenia
La trama se convierte en algo casi real. Te sientes presente, en la situación de Yegor: hueles lo que él huele y sientes lo que él siente. Está impecablemente narrado en primera persona. El hecho de que el autor haya formado parte de las fuerzas especiales del ejército ruso tiene mucho que ver con la sensación de realismo que transmite en su obra. Es bastante explícito.
Sin duda, es un libro que merece la pena. Puede gustar mucho a los amantes de lo bélico, y puede ser un buen comienzo para los que no suelan leer libros del estilo.
Zajar Prilepin
Patologías (Patologii)// Zajar Prilepin (trad. Marta Rebón)// Sinopsis// 377 páginas// Sajalín ediciones// 2012.