Cantidad no había mucha, pero sí una cierta variedad. En esta foto podemos comprobarlo, con la presencia de una pareja de silbón europeo Anas penelope, a la derecha, unos pocos azulones Anas platyrhinchos a la izquierda y un trío de cerceta común Anas crecca, al fondo.
Cuanto mayor es un humedal más distancia suelen mantener las aves con respecto al observador, por eso las fotos en La Granda no son tan espectaculares como en otros enclaves más pequeños. Interesante es la sedimentación de un pequeño grupo de silbón europeo, que en invierno está más ligado a estuarios costeros, de nuevo la pareja a la derecha junto a unos azulones.
Pude constatar la presencia también de un pequeño grupo de cuchara común Anas clypeata, especie en la que el macho es sin duda una de nuestras anátidas más vistosas y llamativas.
No faltaban tampoco unos pocos ánades frisos Anas strepera, que se mantuvieron siempre muy lejos de mi alcance salvo un macho que nadó cruzando el embalse.
Lo único que eché en falta fue la presencia de patos buceadores como los porrones, pero desgraciadamente éstos han sufrido un declive catastrófico general en los humedales asturianos. Para terminar un pequeño vídeo grabado a los silbones y los patos cuchara.