Patrick componía, producía, se codeó con gente como Jean Michel Jarre y otros músicos estupendos para hacer sus discos.
Vale, a pesar de todo se pueden hacer discos de mierda. Y estoy de acuerdo. Pero simplemente quiero decir que no era lo que yo pensaba. El típico guapete que ponía la cara, algo de escasa voz y listo.
Este disco me llamó la atención cuando lo escuché porque salvo un par de temas, el sonido Disco no existe, sino que nos encontramos con un disco básicamente de Pop en el fondo, con reminiscencias de la Chanson y que tiene la curiosidad de que los temas son extensos y algunos con introducciones con sonidos incluso ambientales.
No, no es que sea un disco raro, ni mucho menos. Pero si que me ha resultado curioso y realmente gratificante descubrirlo.
Un disco que se editó en el 80 y sería el canto del cisne para Patrick. Un Patrick que tiene de esas vidas de drogas, sexo y otras cosas como los buenos mitos del Rock.
El tema más conocido y que tuvo éxito en Europa fue Sounds Like Rock-N-Roll. Un tema con mucho Rock en las formas barnizado para que suene Disco. Y el resultado funciona.
En las dos caras del disco comienzan y terminan con unos sonidos electrónicos que parece como si Jena Michel Jarre dejase huella en Juvet.
I don´t Want to be Free es una excelente balada que no se hace empalagosa.
Transit, que habre la cara b, son cerca de diez minutos, donde los primeros encontramos esa electrónica Space que escolta a un piano de forma relajada y tranquila, para cambiar en un momento dado y coger más fuerza, con un sonido más Disco. Y es un tema bastante instrumental que casi podría sonar a un Soft Rock progresivo.
Still Alive es un buen disco. Si señor. O por lo menos a mi me gusta y con el que me llevo un grato sabor de oido.