“De las vastas llanuras del Serengeti a los centros históricos de ciudades como Viena, Lima o Kyoto; del arte rupestre prehistórico de la Península Ibérica a la Estatua de la Libertad; de la Casbah de Argel al Palacio Imperial de Beijing... todos estos lugares, por distintos que parezcan, tienen algo en común: todos son sitios del Patrimonio Mundial, con un valor cultural o natural excepcional para la humanidad que los hace dignos de protección para goce y disfrute de las generaciones futuras.”
“De las vastas llanuras del Serengeti a los centros históricos de ciudades como Viena, Lima o Kyoto; del arte rupestre prehistórico de la Península Ibérica a la Estatua de la Libertad; de la Casbah de Argel al Palacio Imperial de Beijing... todos estos lugares, por distintos que parezcan, tienen algo en común: todos son sitios del Patrimonio Mundial, con un valor cultural o natural excepcional para la humanidad que los hace dignos de protección para goce y disfrute de las generaciones futuras.”