El escenario, un entregado American Airlines Arena que se entregó por completo a su equipo y en especial a Dwayne Wade quién realizó un auténtico partidazo y mantuvo a los de Florida con opciones hasta el final.
A falta de 11 segundos para el pitido final, Wade tuvo que abandonar el partido por un golpe fortuito con Ray Allen y fue entonces cuando con el empate a 98 reflejado en el marcador, Paul Pierce decidió tomar las riendas y jugarse la última canasta.
El pulso no le tembló y realizó un tiro del que pocas veces ha hecho uso este año. The Truth encestó y el 100-98 subió al marcador al mismo tiempo que los leds rojos inundaron el tablero. Suponía el 3-0 y un inyecto de moral tremendo al equipo.
Pero antes de la maravillosa gesta de Pierce, los Celtics tuvieron que luchar muy duro contra unos Heat que realizaron su mejor partido en lo que va de serie y posiblemente de lo que llevamos de temporada. Miami de la mano del habitual sensacional Dwayne Wade con 34 puntos logró llevarse el primer parcial del partido y seguir al término de la primera mitad encima de nosotros.
El tercer parcial parece haberse convertido en el determinante para Boston. Fue el momento clave del partido para los C´s ya que les metimos un 32 a 23 de parcial. Los chicos salieron fuertes tras el descanso y sobretodo Paul Pierce que logró acabar el partido con 32 puntos bien secundado por Ray Allen con 25.
Ray Allen está siendo el gran protagonista de la serie. Si en el primer partido estuvo pésimo, en estos dos últimos sus números han tenido una gran peso en ambas victorias y sobretodo sus porcentajes de tiro, los cuáles se han incrementeado con respecto a la regular season. Ray Allen is on fire!
Por la banca, a destacar Glen Davis con y Tony Allen, con 4 puntos cada uno. Rasheed anotó 2, mientras que ni Robinson, ni Daniels ni Shelden jugaron.
El próximo partido el domingo a las 19:00 hora española. Esperemos imponer el 4-0 y tomar descanso para la siguiente ronda. ¡Hay que dar la sorpresa!