En ese momento mi cabeza de hormiga loca ya se puso en marcha y atosigué a los que estaban a mi alrededor con… “podría hacerlos rosas”, “podría decorarlos como la merdiña”, “hasta podría hacerle ojos a la buttercream para personalizarla”, “podría hacer a Son goku con Arale con fondant”,…. Y así repasando todos los capítulos que había visto de pequeña en el Xabarin de Arale.
250 g mantequilla temperatura ambiente300 g de icing sugar100 g de chocolate blanco
Primero troceamos la tableta de chocolate y la metemos un minuto en el micro para que se derrita. Mucho cuidado que este chocolate es caprichoso y si nos pasamos le salen unos grumos muy poco apetecibles que nos chafan toda la tableta.Lo dejamos enfriar mientras vamos mezclando la mantequilla con el azúcar. Primero a velocidad lenta si no crearemos nuestra propia nevada en la cocina y luego cuando ya esté un poco integrado subimos velocidad.Cuando el chocolate esté casi frío, lo añadimos a la mezcla poco a poco y batimos un minuto más, hasta que la mezcla tenga una consistencia como de helado.En este punto es cuando metes una cucharadita y pruebas a ver qué tal está y se te cae la boca de placer…. Declaro esta buttercream como mi preferida y declaro que intentaré meterla en todo postre que tenga oportunidad.
Para rematarlo, los decoré con unos toppers de Arele y su merdiña sonriente. Además, para poder transportarlos mi novio que es un manitas me hizo una caja con dos separadores ¡a mano!, la verdad es que quedó increíble.