¿Pedir perdón de qué?

Por Daniel_galarza
Por Rubén Ocegueda Torres.
Esta semana comenzó con la inusual y risible petición de Andrés Manuel López Obrador al rey de España, Felipe VI, y al papa Francisco, que se disculpen por la conquista de México de hace 500 años. Como es obvio, Felipe VI rechazó tal petición, y AMLO ha sido el objeto (otra vez) de burla en redes sociales tanto por detractores como por simpatizantes de izquierda. Los pocos defensores alegan que esta petición es legítima, a pesar que los actuales españoles no tienen nada que ver con la conquista, porque España y otras naciones han llegado a pedir perdón por atroces crímenes cometidos siglos atrás. Tal vez no hay mejor ejemplo que la petición de disculpas de Juan Pablo II por las atrocidades de la Inquisición. Un día después de la petición de AMLO, nos enteramos también que el primer ministro de Canadá, Justin Trudeau, exigió al papa se disculpara con los indígenas canadienses. Pero más allá del razonamiento estilo "si los demás lo hacen, entonces nosotros también", ¿qué clase de valor tiene una exigencia como la de AMLO?

Para responder a esta pregunta, mi amigo, el historiador Rubén Ocegueda me permitió compartir su reflexión explicada en nueve sencillos puntos. La suya es prácticamente la misma opinión que he visto de todo historiador que conozco.
Danie Galarza Santiago.


Voy a expresar mi opinión respecto a la petición que le hizo López Obrador a Felipe VI de España y al papa Francisco, acerca de la Conquista de México-Tenochtitlan en el siglo XVI, tomando mucho de lo que he leído estos días.
1) Tanto la carta como el mensaje del vídeo representan una visión anacrónica, obtusa, bizantina y, aunque pretenda ser crítica de la Historia, es precisamente un mensaje de resentimiento chovinista y de traumas no superados.
2) Tiene poco sentido histórico, si tomamos en cuenta que la Conquista de Cortés sucedió hace cinco siglos, en un contexto particular y propio de aquella época. Menos todavía si nos ponemos a pensar que la Nueva España (y con ello posteriormente el Estado Mexicano) surgirían precisamente de ese proceso; y que no es lo mismo el Imperio Español que apenas estaba consolidándose bajo la figura de Carlos I al gobierno que hoy encabeza Felipe VI.
3) Menos sentido tiene si caemos en cuenta que la Conquista de los pueblos mesoamericanos era un proceso inevitable que, bajo las circunstancias expansionistas de la época, tarde o temprano iba a suceder, si no por parte de los españoles, quizás sí de los portugueses, o británicos, o franceses, etcétera. Pero si además tomamos en cuenta que un ejército de diversos grupos indígenas arroparon y defendieron al modesto grupo de españoles, la demanda del presidente mexicano se cae por completo.
4) Pero más allá de eso, tampoco estoy de acuerdo en que los mandatarios actuales tienen una responsabilidad histórica de los personajes de aquellos tiempos. Se es responsable de lo que se hace o deja de hacer, no de lo que hicieron los antepasados. A cada quien le tocó en su momento rendir cuentas y el peso de sus acciones caerá sobre ellos. Además las naciones se transforman y se reinventan, y con ellos su cara hacia el mundo. ¿Por qué deberían los políticos alemanes sentir culpa por el holocausto nazi?
5) Estar dando y demandando disculpas sería además ocioso, latoso, aburrido y cansado, si tomamos en cuenta que la mayoría de los países tienen aberraciones a cuestas. Que las invasiones y las guerras tristemente han sido parte del pasado de la humanidad, y que más vale mirarlas, para estudiarlas y aprender lecciones de éstas, pero no para entrar en una dinámica de nunca acabar. ¿Se imaginan a la cantidad de países que tendría pedirles disculpas no sólo el papa y el rey de España, sino los jefes de estado de Inglaterra, Francia, Estados Unidos y demás?; incluso tendríamos que recurrir, en muchos casos, a disculpas mutuas. México, por ejemplo, expulsó a los españoles bajo la presidencia de Guadalupe Victoria. ¿También deberíamos ofrecer disculpas? ¿Quién le debería más disculpas a quién, Francia a Inglaterra o viceversa? ¿Y cuál sería la vigencia de la ofensa, tendrían que presentar sus disculpas los descendientes de los espartanos y los persas? En mi opinión los errores los reconoce quien los comete.
6) No porque Justin Trudeau o Angela Merker lo hayan hecho anteriormente, deja de ser una tontería y no justifica reclamos tan faltos de fundamento. ¿O realmente tiene relevancia lo que el papa Juan Pablo II haya dicho sobre Galileo?
7) Para reivindicar a los pueblos indígenas no hacen falta disculpas, sino políticas públicas que dejen de maltratarlos y segregarlos.
8) No había ninguna necesidad de buscar un áspero encuentro ni con España ni con el Vaticano, cuando las relaciones son buenas. Tampoco se trata de defender monarquías, sino de tomar la Historia para comprenderla y no para agarrarla de punta de lanza para guerritas simbólicas, si es que no traerá un balance benéfico.
9) Si solamente se quería hablar del tema o dar un comentario, bastaba otro tipo de lenguaje y otro tipo de intenciones.



Rubén Ocegueda Torres se licenció en Historia por la Universidad de Guadalajara, con la tesis "Y todo por lo que dijo Darwin. La recepción del evolucionismo darwinista en Guadalajara". Es miembro de Historiadores de las Ciencias y las Humanidades, A.C. Actualmente está cursando la Maestría en Educación en la UVM.