Título: A todos los chicos de los que me enamoré
Director: Susan Johnson
Guionistas: Jenny Han
Género: Romance, drama
Duración: 1h 39 min
Puntuación: 6
La joven Lara Jean Covey se ha dedicado durante toda su vida a escribir cartas a todos esos chicos con los que tuvo una relación fallida o ni siquiera consiguió tener algo. Todas esas cartas las guarda en una caja que solo ella conoce. Un día, todas esas misivas de amor (o desamor) son entregadas a los chicos a los que iban dirigidas misteriosamente. Ahora Lara tendrá que enfrentarse a sus amores pasados y a la reacción de ellos y de toda la gente de su alrededor que se entera.
Nuestra protagonista es Lara Jean, una chica de dieciséis años bastante inocente que escribe cartas a los chicos por los que ha sentido algo, pero nunca le ha enseñado esas cartas a nadie. Un día, esas cartas son enviadas y la vida de Lara Jean se pondrá patas arriba, sobre todo teniendo en cuenta que uno de los chicos en cuestión es el ex-novio de su hermana y su mejor amigo: Josh.
Seamos claros: esta película es una adolescentada, típica película sobre los problemas de instituto y los amores de la adolescencia, pero no es mala ni estúpida, a pesar de caer en algunos clichés y de que la trama sea bastante predecible.
La premisa de la que parte la película es original e interesante, a pesar de que llegado cierto punto toma un camino bastante más visto y se convierte en una película más, cuando podría haber sido algo distinto. De todas formas, es una película que tiene momentos muy cuquis. La relación de amor y cómo se va desarrollando me ha gustado bastante, y toca temas duros con una gran sensibilidad.
A pesar de todo esto, y como ya he dicho, tiene clichés típicos de las películas americanas que ya cansan un poquito: la chica invisible que se enamora del chico popular, la ex-novia celosa que es una arpía, la mejor amiga que es maravillosa... y así todo. Además, en ocasiones los personajes me sacaban de quicio con sus comportamientos. Había dramas y malentendidos simplemente porque los personajes no hablaban o no se explicaban bien las cosas, o simplemente se enfadaban y se tiraban días sin hablarse por idioteces en lugar de intentar solucionarlo. Algo que pasa siempre en las películas americanas y que yo por más que lo intento, es un tipo de comportamiento que no logro entender.
En resumen:A todos los chicos de los que me enamoré es una película entretenida y que se disfruta si sabes lo que vas a ver, a pesar de que tampoco sobresale dentro de su género y que, al final, no ofrece nada demasiado original.