En las calles y pequeños suburbios norteamericanos se mezclan las pandillas callejeras. Para meterse a negociar ahí es necesario estar ducho y poseer experiencia. No cualquiera puede ingresar a lidiar con traficantes, hay que saber moverse y manejar todo tipo de recursos, desplazar ciertas piezas delicadamente y no ser demasiado abrupto.Día de entrenamiento nos sumerge en ese mundo. Y lo hace enseñándonos dos estilos muy distintos entre sí. Denzel Washingtonestá curtido en el asunto. Trece años de historias lo avalan en el rubro de narcóticos. Sus modos o procedimientos son cuestionables, puesto que oscila entre lo lícito y lo que traspasa esa delgada línea. Se suma Ethan Hawke, mucho más ético, “tiernito” en la jerga, un novato bajo la supervisión de Denzel, en lo que aparenta ser un primer y arduo día de trabajo.
LO MEJOR: no sufre altibajos. Frenética. Washington y Hawke, en ese orden, resaltando la sobresaliente actuación de Denzel. La realidad de lo que postula.LO PEOR:falla en las escenas de enfrentamiento cuerpo a cuerpo, no están bien montadas.
PUNTAJE:7,2