Por unos días hubo complicidad entre mi marido y mi amiga Gemma Ramos (mi agente comercial preferida) por unos días para darme la sorpresa.
¡Gracias, os quiero mogollón!
Esta receta con el título tan simpático es de uno de los libros que venían de regalo, concretamente el de panadería y bollería II; pero que, también se puede hacer de forma tradicional. La receta es cedida por Teresa Sanfont.
Ingredientes
- 180g de leche entera
- 60g de agua mineral
- 60g de aceite + un poco para untar en las manos
- 60g de azúcar
- 25g de levadura prensada (de panadería)
- 350g de harina de fuerza
- pellizco de sal
Más:
- aceite de girasol para freír (yo aove)
- azúcar para rebozar
- 600g de crema pastelera
ELABORACIÓN
Poner en el vaso de la tmx la leche, agua, aceite, azúcar y levadura; programar 1´/37ºC/vel2.
Se añade la harina y la sal y programar 10´´/vel4. A continuación se amasa 2´/vaso/espiga. Volcar la masa en la encimera y con las manos untadas de aceite se forman pelotas del tamaño de un huevo de gallina :) y se van colocando separados sobre un papel de hornear espolvoreado de harina. Dejar reposar hasta que doblen de volumen.
Freír las pelotas a temperatura mediana (del 1 al 9 en el 6). Retirar sobre papel absorbente. Rebozarlas en azúcar, dar un corte transversalmente y rellenar con crema pastelera... o crema de cacao, de chocolate blanco o negro, de queso, etc, etc...
Sugerencia:
Una vez fritas las pelota se les puede dar un baño de almíbar hecho con medio vaso de azúcar, medio vaso de agua y unas gotas de vainilla, hervir unos minutos. Bañar, rebozar y rellenar!!
¡Espero que os guste!