Curiosos protagonistas los de este fin de semana.
Un Barça a la deriva tuvo que dejar su rumbo en manos de Víctor Valdés y por fín la prensa le reconoció los méritos al chico, los blaugrana salvaron un punto gracias a las buenas paradas de Víctor y al ansia de la delantera ché que andaba tan revolucionada que se le desvió el punto de mira...curioso, el odiado Víctor salvando los muebles, se nota que el chico quiere demostrar que vale lo que han pagado por su renovación.
Cuando escuchaba a los medios decir que Víctor Valdés había salvado al Barça, no pude evitar restregarme los ojos y estuve a punto de pedir cita al otorrino por si me traicionaban los oídos... pero es cierto, los periodistas hablaron bien de él.
Pero al escuchar que la premier tenía un nuevo goleador y que era un balón de playa, decidí no llamar al otorrino y pedir cita al psiquiatra, pero para mi sorpresa también era cierto. Una pelota hinchable desvió la trayectoria de la pelota en el partido Sunderland - Liverpool y el esférico acabó dentro de la portería de Reina y para sorpresa de todos el árbitro dio el gol por válido. Según tengo entendido si un objeto extraño entra en el campo se para el partido...además la pelota de playa se encuentra en clamoroso fuera de juego y zancadillea descaradamente al defensa de los Reds.
Menuda semana de sopresas...