Estilo y ambientación en la serie de terror Penny Dreadfull. Me ha atrapado completamente. He de admitiros que me he dejado engatusar desde el primer momento, y os aseguro que no es algo que suela pasarme. Y eso que no me convencía al principio, que pensaba que aparentaba ser más de lo que era eh, pero al final lo que nos gusta y nos tira es lo que nos gusta y nos tira, y no hay más que decir.
Evidentemente, estoy hablando de la serie Penny Dreadful, que como bien sabéis se estrenó hace casi un mes en la web de su mamá Showtime, en lugar de esperar al 11 de mayo, como se dijo en su momento que sería el estreno mundial. Pues bien, vistos dos episodios, os aseguro que me tiene más atrapada que Aragog en la casa de Winny the Pooh.
Peeeero desde esta sección he venido a hablaros de la parte estética de la serie que creo, es, una de sus grandes bazas. La ambientación es perfecta, no tiene un mueble de más ni un corsé de menos.
Cómo te presentan a los personajes, ese vestuario, ese Sir Malcolm indicándole a Miss Ives que ha llegado el doctor Frankenstein, que se desabroche el escote del vestido… y que llegue hasta el final del cuello.
Los colores que rodean a cada ambiente están muy bien marcados. Dorian Grey es de color blanco, aparentemente puro pero más podrido por dentro que una momia. Pasaría la prueba de Don Limpio, eso sí. . Y no sólo porque Reeve Carney comparta pantone con Eva Green, sino porque es sobrenatural, es algo ahí raro que se mueve, que refocila con jóvenes moribundas (bueno, en singular), pero que no deja de ser un ser sobrenatural.
Bestia en escena, dicho sea de paso, gran presencia en pantalla.
La ropa de la Proteus no deja de ser la de un niño grande a quien la chaqueta se le ha quedado pequeña.
El corsé de Brona (Billie Pipper) desteñido con el tiempo y su pelo mal teñido, característicos. Los guantes roídos de Ethan Chandler (Josh Hartnett)
Su ropa ha sido cosida muchas veces
Que le dice la amiga transparente, Vanessa Ives. El mismo pelo de ella, siempre tan bien colocado, tan repeinado, que cuando tiene un arrebato se suelta y cae asalvajado. Su vestido púrpura, su falta de guantes. Las ojeras del doctor, el bastón de Sir Malcolm.
Penny Dreadful es una serie, por encima del terror, sensual. La ves y sientes los placeres, los dolores, los miedos, el tacto, la suavidad, la excitación, la sangre y el hambre de sus personajes, en todos los sentidos. Porque gustará más o menos, eso depende de cada persona y de sus demonios, pero que es una serie que se siente con todo el cuerpo os lo juro por las ojeras de Harry Treadaway.