Muchos de vosotros habréis visto alguna vez la serie de televisión "Se ha escrito un crimen", en la que una escritora de novelas policíacas, llamada Jessica Fletcher, ayudaba a resolver asesinatos y crímenes a las autoridades.
Como gran conocedor del método criminológico, que no criminalístico (hay que diferenciar), en todo tipo de hechos criminales seguidos en el trascurso del tiempo, hay que buscar un nexo común. Modus Operandi, lugares, horas del día, personas... ¿persona? Interesante. Analicemos los personajes que aparecen en la serie.
Primeramente Jessica Fletcher claro está. En cada uno de los episodios era la gran protagonista. Luego podemos señalar a alguno de los personajes secundarios como sus amigos el Sheriff y y el médico, los cuales a veces se escaqueaban un poco de los episodios y no aparecían con tanta asiduidad como su protagonista (lógicamente), y luego tenemos a los que siempre rodean cada uno de los asesinatos, personajes aleatorios que surgían y desaparecían como por arte de magia al comenzar y al acabar el episodio. Nunca más los volveríamos a ver.
Analizando todo esto (es poco la verdad), podemos observar que el único nexo de unión entre todos y cada uno de los crímenes ocurridos en la serie "Se ha escrito un crimen" es Jessica Fletcher. Si... como lo habéis oido, perdón, leído. La culpable es Jessica Fletcher. No puede ser que una sola persona esté presente en cada uno de los asesinatos ocurridos en cada uno de los 264 episodios emitidos. Si partimos de que cada episodio tenía una muerte no natural, podemos afirmar, y eso que no soy de ciencias, que la protagonista asistió a 264 asesinatos. ¿Mucha casualidad no?
Detrás de esa mirada angelical, de esa imagen de mujer mayor con sus años y canas, y de sus pasos cortos y "sinceros" se esconde un ser destructivo con síntomas claros de una Psicopatía galopante, la cual solo busca la destrucción de sus semejantes con el único propósito de aumentar un ego que por lo que se puede ver está muy desarrollado. Menos mal que la serie acabó ya hace tiempo, sino gran parte de la población de la localidad en la que vivía estaría en peligro.
Tener mucho cuidado.