Pensando en el cole.

Por Anaperezllinares

En el blog La Mamá Vaca, he leido que estos días en su Comunidad se están celebrando jornadas de puertas abiertas en los colegios, con el fin de que los padres los conozcan.
Yo pensaba que aún quedaba más tiempo para empezar a pensar en serio en coles, pero parece que, aunque la matrícula se realiza más tarde, hay que empezar a moverse, así que llamaré al que me interesa más para informarme.
Si matriculo a David este año, entrará antes de haber cumplido los tres años. Y la verdad es que no tengo nada claro si es mejor matricularlo o no.
Lo que sí que tengo muy claro es que , como la etapa preescolar no es obligatoria, no lo voy a intentar matricular en un montón de coles, me gusten o no, con tal de que tenga plaza.  Intentaré matricularlo en el público de mi barrio, que por lo visto no está mal, y  como mucho en otro cercano.
Tengo entendido que en la mayoría de los coles, no admiten que los niños lleven pañal, así que esto es algo que determinará si David empieza el curso que viene o no. Tengo muy claro que el control de los esfinteres es un proceso madurativo que no hay que forzar, así que no lo voy a hacer porque en el colegio me lo exijan. David ya nos dice a veces cuando hace caca o cuando va a hacer pipi, pero no nos lo anticipa, sino que lo dice cuando esta ocurriendo. Este es el primer paso, así que supongo que a lo largo de este verano posiblemente lo tenga mas controlado y pueda ir sin pañal durante el día.
En el caso de que tras el verano continue con pañal, en una guarde del barrio tienen una clase para niños de tres años que se quedan sin plaza en el cole y creo que no es obligatorio ir sin pañal, así que sería otra posibilidad.
Por otro lado, tengo entendido que cuando matriculas a los peques en el cole, te dan un formulario a rellenar, donde te preguntan diferentes cosas relativas a su desarrollo y a su vida personal. Por lo visto, una de las preguntas de dicho cuestionario es donde duermen nuestros hijos.
Ya hace tiempo llegué a la conclusión de que no tengo porqué contar a nadie que yo no quiera con quien duerme David. Es algo que pertenece a su (a nuestra) intimidad y que no guarda relación alguna con la que será su vida escolar. De la misma manera, considero que no tengo el porqué debatir con mi pediatra si es correcto o no, ni siquiera hablar del tema, puesto que no es una cuestión de su competencia.
No sé en que medida afectará a la matriculación de David el que yo me niegue a responder determinadas preguntas, pero, aunque pueda parecer una tontería o un encabezonamiento, para mi es importante. Si me ponen problemas, supongo que acudiré al defensor del pueblo o a quien competa para que me expliquen si legalmente están en el derecho de obligarme a responder preguntas personales.
Así que, si todo va bien y no surgen problemas, mi idea es matricular este próximo curso a David en el cole del barrio, que vea lo que es y que el mismo decida si quiere asistir o no. Si por mi fuera, no lo llevaría, pero no quiero imponer mis ideas o prefencias a David, prefiero que sea el quien decida si se lo pasa bien o no, sin obligarle a ir, pero tampoco a quedarse. Si, tras unos cuantos días de adaptación decide seguir en el cole, estupendo y sino a casa con mamá y lo intentaríamos de nuevo el año que viene (como no tengo previsto trabajar fuera de casa en los próximos años, no sería un problema).
Espero que enfocándolo así, sin presiones ni expectativas,  resulte mas fácil tanto para el como para nosotros y, de paso, enseñarle algo que considero muy importante: que las decisiones en casa se toman entre todos y que su opinión es importante.