Muchos de los grandes avances se producen en escenarios ficticios o de prueba. Ya sea en investigaciones científicas, maniobras militares, ejercicios de entrenamiento para situaciones de espionaje o para encontrar vulnerabilidades en los sistemas informáticos de defensa.
Precisamente para encontrar "agujeros" en defensa, el Pentágono está llevando a cabo la operación "Hack the Pentagon", cuyo objetivo es identificar vulnerabilidades en los sistemas informáticos de defensa. Para ello se incentiva a los hackers que deseen participar con un sistema de recompensas económicas y profesionales.
El hecho de depender de la informática actualmente, propicia un escenario lleno de potenciales riesgos y peligros para la defensa nacional. Son habituales los ataques a los sistemas informáticos del Pentágono, las agencias de Inteligencia y numerosas empresas estadounidenses.
Evitar el robo de información clasificada y la infiltración de hackers en las redes es una prioridad para los programas y los protocolos de seguridad. Para implementar medidas efectivas en estos programas se ha puesto en marcha esta iniciativa, con la que se busca localizar "agujeros" o debilidades de los sistemas. Nadie mejor que algunos de los más avezados hackers del mundo para proteger nuestras redes de defensa de los ataques que vienen de ahí fuera, cada vez más refinados.
El programa premiará a los hackers más hábiles e inteligentes y no sólo eso, sino que además les abrirá la puerta para colaborar con los mejores expertos en la materia y los medios más avanzados. Una oportunidad excepcional para trabajar en la seguridad nacional de Estados Unidos, en defensa de la libertad y además haciendo lo que más les gusta a los hackers.
Este sistema de pruebas en busca de fallos de seguridad es habitual hacerlo en el Pentágono, pero por parte de personal interno. La novedad es que ahora se abre a la participación de hackers del exterior, lo que plantea interesantes propuestas para ambas partes.
Hoy por hoy, la ciberseguridad es uno de los campos de batalla en los que se libra una guerra sin cuartel. Proyectos como este, que también se aplicará en las agencias de Inteligencia, nos garantizan seguir llevando la iniciativa y contar con los mejores profesionales del hackeo.