Detrás de la sonrisa Mujica hay un tipo simpático y lúcido que corre de izquierda a derecha para beneficio de su país. Alguien me decía hace unos años que eso de ser de un lado o del otro, políticamente hablando, ha quedado caduco, pues lo importante en materia social es que la gestión del gobierno aporte el mejor beneficio a su nación.
Habría que preguntarle a Mujica si es capaz de pedirle a Raúl Castro que cese la persecución y encarcelamiento de la oposición cubana; en el caso que lo haya hecho, jamás se atrevería a divulgarlo, pues sabe que con ello causaría malestar en el dictador.
Antes de salir a mendigar al extranjero, primero hay que organizar una casa que permanece patas arriba, donde constantemente se golpea a las Damas de Blanco, y se le endilgan delitos de toda índole a los opositores, incluyendo los degradantes, para sancionarlos a través de los tribunales que obedecen al mandato de la Policía Política.
Una vez que se logre la anhelada justicia, algo difícil dentro de un régimen totalitario, entonces se podrá pedir beneficios y retiros de medidas que han sido necesarias para controlar y amainar un tanto la soberbia gubernamental de los hermanos Castro.
Cuando el señor Presidente José Mujica haya logrado hacer ceder al totalitarismo, entones el pueblo de Cuba le agradecerá su intromisión, no para salvar al Régimen sino a la población civil, y se le aceptará como “embajador de buena voluntad ante el mundo”.
Todos sabemos que el día que Mujica le pida a la dictadura ceder un ápice de su furor implacable, hasta ese momento lo considerará “amigo”, puesto que ella recibe el tema de los Derechos Humanos como ataques de espías y opositores que desean dañarla y “sacar a los Castro del poder”,
Ángel Santiesteban-Prats
Prisión asentamiento de Lawton. Mayo de 2014
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Para que Amnistía Internacional declare prisionero de conciencia al disidente cubano Angel Santiesteban
Para firmar la petición siga el link:
https://secure.avaaz.org/es/petition/Para_que_Amnistia_Internacional_declare_prisionero_de_conciencia_al_disidente_cubano_Angel_Santiesteban/?fbss
Detrás de la sonrisa Mujica hay un tipo simpático y lúcido que corre de izquierda a derecha para beneficio de su país. Alguien me decía hace unos años que eso de ser de un lado o del otro, políticamente hablando, ha quedado caduco, pues lo importante en materia social es que la gestión del gobierno aporte el mejor beneficio a su nación.
Habría que preguntarle a Mujica si es capaz de pedirle a Raúl Castro que cese la persecución y encarcelamiento de la oposición cubana; en el caso que lo haya hecho, jamás se atrevería a divulgarlo, pues sabe que con ello causaría malestar en el dictador.
Antes de salir a mendigar al extranjero, primero hay que organizar una casa que permanece patas arriba, donde constantemente se golpea a las Damas de Blanco, y se le endilgan delitos de toda índole a los opositores, incluyendo los degradantes, para sancionarlos a través de los tribunales que obedecen al mandato de la Policía Política.
Una vez que se logre la anhelada justicia, algo difícil dentro de un régimen totalitario, entonces se podrá pedir beneficios y retiros de medidas que han sido necesarias para controlar y amainar un tanto la soberbia gubernamental de los hermanos Castro.
Cuando el señor Presidente José Mujica haya logrado hacer ceder al totalitarismo, entones el pueblo de Cuba le agradecerá su intromisión, no para salvar al Régimen sino a la población civil, y se le aceptará como “embajador de buena voluntad ante el mundo”.
Todos sabemos que el día que Mujica le pida a la dictadura ceder un ápice de su furor implacable, hasta ese momento lo considerará “amigo”, puesto que ella recibe el tema de los Derechos Humanos como ataques de espías y opositores que desean dañarla y “sacar a los Castro del poder”,
Ángel Santiesteban-Prats
Prisión asentamiento de Lawton. Mayo de 2014
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