Pequeño gran problema: Forúnculos

Por Rafael @merkabici
CICLISMO Y SALUD NOTICIAS

Pequeño gran problema: Forúnculos

by María Auxiliadora Martín 6 octubre, 2014 0 comments


Estoy entre ciclistas y aficionados a diario, también con ciclistas mujeres y me atrevería a decir que el problema de que vamos a hablar atañe tanto a hombres como a mujeres por igual y que es un problema extendidísimo del que poco se sabe y poco se hace. Además, es una afección que se da por igual en ciclistas amateur y en ciclistas “mega pro”. Al final, todos estamos hechos de la misma materia prima.En toda mi trayectoria pocas veces he encontrado ciclistas que no hayan sufrido de éste pequeño gran mal. Y es curioso como a veces nos quejamos de males mayores pero, llega un forúnculo, o un pelo enquistado y tenemos que dejar de pedalear por un tiempo, no hay otra alternativa. El dolor puede ser tan agudo que nos revuelve el cuerpo y, al estar en el mayor punto de apoyo del cuerpo no hay alternativa que no sea parar la actividad en fases agudas.

Para solucionar el problema es interesante saber de qué hablamos exactamente.

¿ Qué son los forúnculos y por qué salen?

Los forúnculos son unos sacos de pus que se forman debajo de la piel, normalmente en un folículo piloso (donde crece un pelo) fruto de una infección por parte de una bacteria de tipo Estafilococo.

Esquema real de la infección.

Suelen comenzar como bultos rojos y blandos que van adquieriendo más consistencia. En nuestro caso, el aumentar la presión sobre la zona, el roce de la badana y el sudor harán que la infección se propague mucho más rápido y que los síntomas de inflamación se desarrollen mucho más rápido que en una persona que no monta en bicicleta.

Normalmente los forúnculos suelen aparecer en zonas de mucha presión o de fricción, que es por dónde nos entran éstas bacterias (responsables de muchas infecciones a su vez). En ése momento, nuestro organismo envía glóbulos blancos a combatir la infección y de ahí la inflamación.

La supuración en ocasiones es una mezcla blanquecina de pus y sangre.  Ésta sangre es fruto de la mezcla de células “viejas” con nuestros glóbulos blancos que tratan de combatir ésta infección y junto a las bacterias responsables de la infección.

Es por eso que reventar o provocar la supuración no es recomendable porque podemos propagar la infección.

Tratamiento y remedios para los forúnculos.

Cuando notemos que un forúnculo nos está saliendo, siento deciros que poco podemos hacer, simplemente mantener medidas de higiene óptimas  ( como debemos hacer siempre).  Puede ayudarnos aplicar yodo en la zona en la que notemos que nos está apareciendo el forúnculo y repetir la operación cada 3-4 horas. Aplicar frío, en éste momento, puede calmarnos esa sensación de quemazón que puede conllevar la infección.


Cuando ya tenemos el forúnculo y éste se distingue perfectamente; en ésta fase el dolor será importante y ya nos molestará bastante en la zona cuando nos sentemos en la bici. Hay varios remedios que podemos aplicar:

  • Podemos aplicar un paño o compresa estéril empapada con agua y sal templada sobre la zona unas 2-3 veces al día. Esto provocará la ebullición de la infección, desinfección y su disolución pero hay que ser constante.
  • Aplicar calor ( con una manta eléctrica) durante unos 20 minutos dos veces al día. Esto hará que aquellos forúnculos que estén en fase de quiste ( es como una bolita muy localizada y dura ) se disipe y se reblandezca.
  • Continuar con la aplicación de yodo sobre la zona, una vez, limpia y seca.
  • Y lo más importante, consultar con el médico en fases agudas para que nos facilite alguna pomada antiséptica o antibiótica que nos garantice la limpieza interna de la zona. Hay muchas y muy buenas. Pero lo mejor, es que consultéis con el especialista y os recomiende la más adaptada a la fase del forúnculo.

Si el Forúnculo no desaparece, no cesa en su dolor, tened en cuenta que es muy fácil que modifiquemos la postura en la bici para evitar ese punto de apoyo que tanto nos duele. No es extraño pensar que ésta modificación . Éste punto, que parece difícil de imaginar, lo he visto en muchas ocasiones cuando por no abandonar el entrenamiento o una competición de varios días, forzamos la postura con nefastas consecuencias para otras estructuras, provocandonos lesiones mecánicas tales como sobrecargas bestiales que derivan en tendinitis o males mayores. Ojo con llegar a éste punto.

El último recurso para solucionar un forúnculo, que en la mayoría de los casos, aparece y desaparece, constantemente, sin llegar a eliminarse por completo, es la cirujía. Ésta normalmente consiste en extirpar ese folículo y limpiar la zona adherente. La opereación es sencilla y requiere anestesia local; tan sólo requiere la aplicación de antibióticos y ser estrictos con los tiempos de limpieza y cicatrización, que a veces, son conflictivos en la zona. Éstas operaciones son quizá la última alternativa para erradicar por completo esos incómodos compañeros de viaje.

¿ Cómo podemos prevenir la aparición de forúnculos?

 Hay que tener en cuenta, que la zona púbica está muy vascularizada, con multitud de terminaciones nerviosas y linfáticas. Éstas no están preparadas para una compresión contante así que debemos cuidar la zona y vigilarla permanentemente.

 Al ya comentado remedio de aplicación del yodo en las primerasfases; debemos de añadir que es importante y recomendable la aplicación de pomadas deslizantes e hidratantes durante la práctica deportiva en la zona. Éstas deben de ser específicas ya que necesitan una textura cremosa que no contenga humedad y que deslize nuestra piel sobre la badana sin llegar a humedecerla en exceso ( ello conllevaría la proliferación de bacterias). Por ejemplo la vaselina o el aceite, no reúnen esas cualidades así que os recomiendo aplicar cremas protectoras especializadas en ciclismo de competición.

Espero haberos podido ayudar e informar sobre éste tema del que todos hemos padecido alguna vez y que tanto trastorna nuestros planes.  Todo mi post se reúne en un solo consejo acerca de éste mal: Merece la pena cuidar lo que merece la pena disfrutar.

¡Salud!