Pequeño manifiesto para hoteles en Redes Sociales

Por Hoteles20

 
Actualmente las empresas en redes sociales están "en pañales" y la gran mayoría no está realmente preparada para afrontar lo que las redes sociales ofrecen. El paso inicial es el que ya hemos dado, el de externalizar la gestión de nuestra presencia en ellas. Este paso es necesario, y el más adecuado ahora mismo, siempre que se pueda contar con alguien con profesionalidad contrastada. Hoy estamos echando raíces y apareciendo (literalmente) en los lugares en los que participan e interactúan nuestros potenciales clientes, los cuales, en el caso de un hotel, son todas y cada una de las personas que formas esos cientos de millones de usuarios de la principales redes sociales (Facebook, Twitter y Google plus).
Pero este primer paso no debe ser el definitivo, sino un paso transitorio a lo que de verdad será la situación ideal de cualquier empresa. Esta situación es eliminar la dependencia de una externalización para gestionar esta presencia. El siguiente paso debe ser la implantación de una "cultura social" en la que todos y cada uno de los trabajadores de la empresa deben participar, demostrando que la empresa es humana. Podrá hacerse de forma autónoma por el hotel o con una colaboración externa en forma de consultoría y formación. Sea como sea, la tendencia en los próximos años, será la auto-gestión de la empresa, de la mano de los propios integrantes de la misma; desde la dirección hasta el último nivel jerárquico del organigrama.
La concepción de empresa humana, de marca humana, es la que realmente va a conectar con personas y hoy en día, las redes sociales son el sitio perfecto para lograr esta conexión y conseguir dar esa imagen humana de la que hablamos. Pero para mostrar esa cara es necesaria la participación de todas las personas que forman la empresa. Por esta razón debemos invitar a la plantilla en su totalidad a que participen del día a día de la empresa en las redes sociales, comentando, compartiendo, tuiteando, enlazando las publicaciones que la empresa, como marca, está realizando en el difícil camino de conseguir tener una presencia y crear una comunidad a su alrededor. Y esto hay que hacerlo sin miedo a equivocarnos (somo humanos) y con la tranquilidad y el orgullo de decir públicamente, en las redes sociales, que pertenecemos a esa empresa, que la defendemos y que cualquier duda, crítica o sugerencia de cualquier usuario, cliente o quien sea, pueden dirigirla a cualquiera de las personas que trabajamos en ella, porque la empresa somos estas personas, éstas que sustentan la marca y que la hacen humana.