Construido en base al dinero desembolsado por el jeque árabe Abdullah Bin-Nasser Al-Thani, el Málaga se constituyó en el gran protagonista del pasado mercado veraniego y con el firme objetivo de hacerse de un lugar entre los grandes del fútbol español contrató a futbolistas de renombre y trayectoria como Joris Mathijsen, Jeremy Toulalan, Joaquín, Santi Cazorla y Ruud Van Nisterlrooy, quienes aunque llegaron iluminados por los flashes hasta el momento no han cumplido con las expectativas y han sido relegados a un segundo plano por Francisco Román Alarcón, más conocido como Isco.
Ex canterano del Valencia, club en el que destacó en las divisiones menores y debutó de forma oficial en noviembre del 2010, este joven y habilidoso centrocampista creativo causó mucho menos revuelo cuando arribó al club, pero dejando sorprendido a aquellos que aun no habían sabido apreciar su calidad se ha transformado en el fichaje más rentable del cuadro conducido por Manuel Pellegrini y en la gran revelación de la Liga.
A sus 19 años, Isco se adaptó con una inusual naturalidad para jóvenes de su edad y sumando cada vez más minutos en el once titular ha firmado una progresion meteórica, dando muestras de habilidad permanente y erigiendose en una pieza clave en el andamiaje colectivo del equipo.
Nacido el 21 de abril de 1992 en Benalmádena, un municipio de la provincia de Málaga situado en la Costa del Sol, Isco no deja indiferente a nadie cuando toma contacto con el balón, destacándose principalmente por su depurada técnica, su gran vision de juego y su extraordinaria capacidad para gambetear rivales, dar pases en corto y en largo y cambiar el ritmo y el sentido de una maniobra.
De participaciones siempre destacadas en la selección española Sub 20 y Sub 21, Isco ha irrumpido de tal forma que incluso ha despertado el interés de seleccionador nacional Vicente del Bosque, quien consciente de que se esta en presencia de un gran futbolista, de presente esperanzador y futuro brillante, ya lo ha estado siguiendo bien de cerca.
Aunque todo parece estar legando muy de golpe, el pequeño Isco es perfectamente consciente de que aun es muy joven y le restan cosas por aprender y desarrollar, razones por la cual se muestra siempre centrado al momento de ser receptor de infinidad de elogios. Hace bien, ya que solo manteniéndose con los pies sobre la tierra podrá seguir dando pasos seguros y trazando un camino que amenaza con transformarlo en uno de los futbolistas más destacados de los próximos años.