La hidratación dermatológica del bebé es una cuestión básica que toda madre sabe. Es importante hidratar su piel y con productos afines. Ya sabéis que soy mucho de usar aceites naturales, como el aceite de Rosa Mosqueta.
Al principio usamos todas las cremas hidratantes que nos llegaron de muestra. A Bebé Fúturo le vinieron muy bien, pero a Papá Fúturo le causaban alergia (curiosidades de la vida).
Después compré de nuevo aceite de almendras y fue lo que usamos.
Aunque Papá Fúturo se negaba a usarlo porque no le gusta quedarse pringado y en ese tiempo laboral en el que yo no veía a Bebé Fúturo quien se encargaba era él, así que le hidrataba con otras cremas.
Para mi sorpresa, Bebé Fúturo tenía el culete rojo mucho más a menudo, nunca gasté tanta crema para culo como en esa etapa. Todavía no lo asociaba, pero gastaba los tubos de muestra casi por semana. Y él se mostraba en general mucho más incómodo y enfadado que de costumbre.
Como ya sabéis, volví a una rutina laboral que me permitía hacerme cargo de Bebé Fúturo y volví a usar el aceite de almendras.
¡Milagro! Al día siguiente se le habían quitado las rojeces mucho más deprisa que con cualquier crema… Y al cabo de los días, revisando todos los días a ver cuanta rojez tenía, ¡ni rastro!
Desde entonces, no ha vuelto a tener ni una sola rojez. Y la sonrisa que me echa cuando ve que le pongo pringoso del bote azul (donde está el aceite) comparado con usar otra crema hidratante no tiene precio. Parece como si supiera, pero sin poder hablar.
Si me pedís recomendación, vuelvo a sugerir Manuel Riesgo para este producto. Yo compro el bote de un litro y tengo un bote que reutilizo rellenado (mucho más práctico). Lo compré al poco de nacer Bebé Fúturo y todavía me queda la mitad.