Perdidos en el desierto | Kelchum the camel-killer

Publicado el 25 diciembre 2009 por Jaime

Para este día de Navidad dejo la anécdota más comentada y recordada del viaje.

Después de resolver el incidente del timo y habiendo resuelto pasar la noche en el desierto nos fuimos a dormir. Creo que aquella fue la mejor noche que pasé en Marruecos, me imagino que fue porque por una vez nos acostamos teniendo claro qué íbamos a hacer al día siguiente.

El caso es que amaneció un día estupendo y, después de un copioso desayuno, decidimos pasar la mañana en las dunas para aprovechar a hacer algunas fotos y rebozarnos un poco.

Después de comer nos empezó la expedición en camello. Cada uno nos montamos a horcajadas sobre un dromedario que nos asignaron (sí, aunque hable de camellos en realidad son dromedarios) y, en fila india, emprendimos el camino hacia las jaimas. La verdad es que ir montado en la joroba de un camello es una experiencia distinta, notas cada paso que da el camello y como sus patas se hunden en la arena.

El caso es que entre risa y risa el camello de Ana se tiró un eructo, o al menos eso es lo que le pareció a Moni, y, de repente, Kelchum (Ana) empezó a decir que su camello estaba haciendo cosas raras. Desde atrás, lo único que veíamos eta como el camello de nuestra amiga cojeaba y andaba como borracho y todo andando por el filo de una duna bastante alta desde la cual la caída habría sido considerable.

Una vez hubimos pasado la duna, el camello de Ana se arrodilló y la muchacha bajó como pudo, fue el tiempo justo para que el animal estirara el cuello para luego doblarlo y caerse desplomado. En esos momentos de tensión, los camellos de delante y detrás del de Kelchum se vieron ahorcado y retraído por las cuerdas que nos unían a todos. Justo después de que nuestro guía, Yuserff, desatase los camellos, nuestro amigo Manolo (Karim) pronunció la sentencia: "Kelchum camel finish". Y así fue el camello se murió a medio camino del desierto.

Por el resto del viaje Ana fue Kelchum la matacamellos y todos recordaremos el incidente en el que a Ana se le murió un camello entre las piernas.