Por su culpa estoy pasando unos días horrorosos, confié en ella y por eso en este momento me veo así. Durante este periodo de indecisión medite muchísimo sobre que hacer con los libros impresos:La primera opción que pensé fue quemarlos, pero si hago eso voy a tener demasiado complicado seguir escribiendo.La opción de regalarlos también se cruzó por mi mente, pero claro si hago eso o si los quemo me quedo sin fondos.Por último, pensé en venderlos a precio de coste y de esa forma recuperar la inversión. Esta última opción creo que va a ser la mejor. ¿Qué pensáis?Por el momento ya estoy trabajando con una nueva correctora. Pero no os voy a ocultar cómo me siento nunca os oculto nada y no voy a empezar en este momento. Estoy pasándolo fatal, el agobio me agota y llevo desde el momento en el que me enteré que casi no duermo. En este periodo eh perdido casi cuatro Kg y no estoy a dieta. Mis amigos me han dicho hoy que no me preocupe tanto, tranquila no se nota, comentan que no han visto nada... pero me duele mucho tener mal la edición por culpa de otra persona. No sé si hago bien o mal, pero siento la necesidad de ser totalmente franca con vosotros. También quiero agradecer a mi buen amigo Javier Carretero porque en su club de fans colgó un mensaje de apoyo. El cual me animo a la vez de hacerme llorar. ¡Sí! Estos sentimientos contradictorios me están volviendo loca. A continuación dejo el mensaje:
Soñadores hoy estoy aquí para pediros perdón. Hace algo menos de un mes que se que Traición - Un Viaje Inesperado, contiene fallos que no debería tener. Como bien sabéis, soy disléxica y llevo muchísimos años luchando contra ese problema. Por eso contraté una correctora de estilo y ortotipográfica, dicha persona no cumplió bien con su trabajo, no os voy a decir su nombre pues si ella quiso perjudicarme yo no soy igual, tampoco sé porque lo hizo aunque confieso que por mi mente se han pasado muchas ideas. Inmediatamente descarto todos esos pensamientos, no me gusta ser mal pensada.
Por su culpa estoy pasando unos días horrorosos, confié en ella y por eso en este momento me veo así. Durante este periodo de indecisión medite muchísimo sobre que hacer con los libros impresos:La primera opción que pensé fue quemarlos, pero si hago eso voy a tener demasiado complicado seguir escribiendo.La opción de regalarlos también se cruzó por mi mente, pero claro si hago eso o si los quemo me quedo sin fondos.Por último, pensé en venderlos a precio de coste y de esa forma recuperar la inversión. Esta última opción creo que va a ser la mejor. ¿Qué pensáis?Por el momento ya estoy trabajando con una nueva correctora. Pero no os voy a ocultar cómo me siento nunca os oculto nada y no voy a empezar en este momento. Estoy pasándolo fatal, el agobio me agota y llevo desde el momento en el que me enteré que casi no duermo. En este periodo eh perdido casi cuatro Kg y no estoy a dieta. Mis amigos me han dicho hoy que no me preocupe tanto, tranquila no se nota, comentan que no han visto nada... pero me duele mucho tener mal la edición por culpa de otra persona. No sé si hago bien o mal, pero siento la necesidad de ser totalmente franca con vosotros. También quiero agradecer a mi buen amigo Javier Carretero porque en su club de fans colgó un mensaje de apoyo. El cual me animo a la vez de hacerme llorar. ¡Sí! Estos sentimientos contradictorios me están volviendo loca. A continuación dejo el mensaje: Cada vez que leo el mensaje me animo porque sé que ahí personas apoyándome y animándome. Pero también termino llorando como una niña chica, reviviendo toda la angustia y el dolor sufrido a la hora de estar pagando algo por lo que no eres culpable.En este momento lo único que quiero es que está mala racha pase, para poder dejar todo guardado en un cajón.Quiero agradeceros a todos por estar siempre ahí, por todo lo que hacéis día a día de verdad sois geniales. Y en especial a Javi, quiero darle las gracias por ser tan buen amigo. Gracias, de verdad muchas gracias. Tus mensajes siempre llegan en el momento propicio.
Por su culpa estoy pasando unos días horrorosos, confié en ella y por eso en este momento me veo así. Durante este periodo de indecisión medite muchísimo sobre que hacer con los libros impresos:La primera opción que pensé fue quemarlos, pero si hago eso voy a tener demasiado complicado seguir escribiendo.La opción de regalarlos también se cruzó por mi mente, pero claro si hago eso o si los quemo me quedo sin fondos.Por último, pensé en venderlos a precio de coste y de esa forma recuperar la inversión. Esta última opción creo que va a ser la mejor. ¿Qué pensáis?Por el momento ya estoy trabajando con una nueva correctora. Pero no os voy a ocultar cómo me siento nunca os oculto nada y no voy a empezar en este momento. Estoy pasándolo fatal, el agobio me agota y llevo desde el momento en el que me enteré que casi no duermo. En este periodo eh perdido casi cuatro Kg y no estoy a dieta. Mis amigos me han dicho hoy que no me preocupe tanto, tranquila no se nota, comentan que no han visto nada... pero me duele mucho tener mal la edición por culpa de otra persona. No sé si hago bien o mal, pero siento la necesidad de ser totalmente franca con vosotros. También quiero agradecer a mi buen amigo Javier Carretero porque en su club de fans colgó un mensaje de apoyo. El cual me animo a la vez de hacerme llorar. ¡Sí! Estos sentimientos contradictorios me están volviendo loca. A continuación dejo el mensaje: