Ex jefe de la Policía Local de sa Pobla. Hace dos semanas, Pere Perelló dejó el cargo de jefe de la Policía Local de sa Pobla para pasar a ejercer una segunda actividad que le mantendrá alejado de unas calles que conoce muy bien. Autor de diversas obras literarias y colaborador habitual de la prensa comarcal, el veterano agente es uno de los mejores conocedores de la población magrebí que reside en la localidad mallorquina.
Magdalena Serra.Es una de las personas que conocen más de cerca la realidad social de sa Pobla y nadie conoce como él los entresijos del municipio. Pere Perelló (sa Pobla 1960) forma parte desde hace 31años de la plantilla de la Policía Local del municipio, donde ha ejercido de mediador entre la población inmigrante que ha ido desembarcando desde principios de los 80. Durante los últimos 12 años ha sido el responsable de la Policía Local de sa Pobla, puesto que decidió dejar hace dos semanas para pasar a segunda actividad. Ha visto llegar al poder a ocho alcaldes y ha compaginado su labor de policía con su gran pasión, la escritura.„¿Es fácil ser policía en sa Pobla?„No lo es. El carácter ´pobler´ es introvertido, payés y duro, y en los últimos años ha recibido una gran inmigración, hecho que ha producido un cambio en su tejido social. Los policías de sa Pobla tenemos una visión peculiar porque nuestro trabajo consiste en entender la situación, mediar y prevenir problemas. Tenemos una visión más amplia, ya que si sólo aplicáramos el manual y ejerciéramos como funcionarios crearíamos conflictos.„¿Qué supuso para el cuerpo de Policía la llegada de inmigración?
„Los primeros inmigrantes que llegaron al municipio eran marroquíes. Vinieron en 1981 para trabajar en la Cooperativa Agrícola Poblera y se encontraron con que había mucho trabajo, lo que propició un efecto llamada. Al poco tiempo el municipio recibió más inmigrantes y en la Policía nos encontramos con que no conocíamos su realidad ni su manera de ver el mundo, lo que dificultaba que nos relacionáramos con ellos. Entonces decidí que no teníamos que tener miedo a lo que desconocíamos y creamos unos cursos en colaboración con los servicios sociales para conocer la realidad islámica, curso que ahora también se imparte en las comisarias de Palma.„¿Cree que actualmente en el municipio hay una integración real?
„Desconozco el significado de la palabra integración. Puedes preguntar a cien personas y cada una dará una definición diferente según lo que le convenga. La realidad es que en sa Pobla hay dos sociedades que viven dentro de un mismo núcleo, pero realmente se comparten pocas cosas. Hay mucha distancia entre ´poblers´ y marroquíes y no hay una relación clara. Ni los ´poblers´ de nacimiento nos preocupamos de saber cómo son los recién llegados ni viceversa. Hemos tenido la oportunidad de conocernos pero no se ha producido la interacción.„¿Es sa Pobla un pueblo racista?
„No lo creo. Hay un cierto rechazo hacia los inmigrantes pero no se han producido situaciones claras de racismo. Diría que más que racismo se respira desconfianza.„¿Cuántas nacionalidades hay en el municipio?
„Actualmente conviven entre 45 y 55 nacionalidades diferentes pero han llegado a coexistir hasta 70. La población no comunitaria supone alrededor del 20% de todos los habitantes del municipio, de la cual la más numerosa es la magrebí, que ronda las 1.700 personas. No obstante, la población inmigrante real es mayor porque en las estadísticas no se reflejan los hijos de inmigrantes que han nacido en el municipio, que a pesar de no considerarse extracomunitarios, muchos de ellos no hablan catalán ni castellano ni siguen las costumbres propias del municipio.„¿La convivencia entre ellas ha generado conflictos?
„Ha habido peleas violentas pero no han dejado de ser situaciones puntuales. En diez años pueden haberse producido unas cinco. Las situaciones más complicadas se han vivido entre la población sudamericana, que llegó casi a superar el millar, y la marroquí, pero debido a la crisis muchos sudamericanos han regresado a su país de origen, hecho que ha calmado los ánimos.„Una de las grandes preocupaciones de los vecinos es la inseguridad ciudadana. Muchos relacionan los robos y actos vandálicos con la población inmigrante. ¿Es realmente así?
„No es así. Las estadísticas lo desmienten. Los vecinos echan la culpa a la inmigración sin justificación. Hay que tener en cuenta que la gente que emigra busca trabajo y una vida mejor y no vienen a robar. Siempre abandonan el país los que son más atrevidos y pese a saber que añorarán a su familia dan el paso.„¿Hay más robos en sa Pobla que en la media de toda la isla?
„No, más bien todo lo contrario. Sa Pobla tiene uno de los índices de delincuencia más bajos de Mallorca, equiparables a los de Sineu y Porreres. Realmente es un nivel atípico si se tiene en cuenta la población que habita el municipio. El principal problema es que nunca hemos sabido transmitir o explicar a la gente esta realidad y me duele el pensar que si ahora salgo a la calle y le pregunto a una vecina si se siente insegura, seguramente me dirá que sí. La gente puede salir tranquila a la calle, las estadísticas y el nivel de denuncias lo demuestra.„Hace dos meses, dos menores magrebíes agredieron sexualmente a una joven. ¿Se temió en algún momento que se creará un conflicto violento entre ´poblers´ y magrebíes?
„Al principio temimos que lo pudiera haber pero supimos gestionar la situación para que el ambiente no se caldeara aún más y derivara en una realidad más desagradable. El futuro del municipio pasa por que la policía medie entre las sociedades y prevenga conflictos.„¿Qué papel tiene la mujer magrebí en este futuro?
„Estoy convencido que las mujeres tendrán un papel importante en el futuro, que tal vez pueda propiciar que haya un cambio real en el nivel de relaciones entre culturas en el municipio. Se pueden ver mujeres comprando en los supermercados cuando hace diez años era impensable y lo principal es que muchas están finalizando cuarto de ESO, a diferencia de los varones, quienes dejan los estudios antes. Quiero pensar que algo está cambiando y que el futuro pasará por sus manos.„¿El burka sigue presente en las calles del municipio?
„En absoluto. En sa Pobla sólo existió un caso puntual de una joven que portó burka, pero fue un hecho aislado que para nada representa a toda la población marroquí. Esta mujer ahora sólo lleva un velo islámico que no le tapa totalmente el rostro.