[...] «Asisto a reuniones de jóvenes periodistas, a sus debates por todo tipo de medios. Les preocupa su futuro, en demasía “el modelo de negocio” y si tendrá mejores resultados en web o en papel -debo reconocer que esa disyuntiva ha llegado a saturarme-. Y todo se resume en bien poco: hay demasiados periodistas, como hay demasiados tenderos, fabricantes de coches y de todo lo que se venda. Las empresas periodísticas también tienen la vista puesta en “la venta”. Ése es el problema esencial.
¿Qué hemos ganado con la supuesta pluralidad? ¿Ampliar los jugadores en busca de negocio? Ni siquiera. ¿Defiendo los monopolios? No. Además eran inviables ya entonces con la comunicación por satélite y después con Internet. Lo que sí sé es que algo se hizo muy mal, porque la ciudadanía estaba mejor informada que ahora con la masificación»...
[+] El Periscopio
Escribe Rosa María Artal: