Pero lo bueno se acaba, y ayer, 19 de agosto, volví al trabajo. Con mucha pereza.
En este tiempo, manualidades, las justitas. Básicamente he decorado capazos, que paso a enseñaros.
Para un cumple.
Este está todavía a la venta. ¿Alguien se anima?
Este fue un encargo que se marchó a Barcelona.
Otro encargo que, por problemas con correos, no llegó a su destino. Aunque encontró enseguida nueva dueña. Y es que los buhos tienen algo especial, verdad?
Tendré que ponerme a pensar qué voy a hacer cuando pase la temporada veraniega. Quizás me ponga con la Navidad. No lo sé. Tengo mucho calor todavía. ¿Alguna sugerencia?