Periplo de amor y lucha, la dedicatoria escrita en este libro comienza diciendo "Para Manu, compañero de teatro y puzzles, compañero del alma compañero..."Desde aquí comienzo a leer un libro de casi 250 páginas, Escrito/Vivido, por
Yolanda Farr una actriz con un recorrido artístico...bla, bla, bla... Lo siento queridos lectores no podría hablar de su curriculum ya que es demasiado extenso y lleno de viajes y muchas, muchas dificultades, lo mejor es que os leáis dicho libro, se encuentra en la librería del Cine Doré (Madrid).
Podría empezar diciendo que tiene un cuerpo 10, una voz 10, unas facultades artísticas 10 etc. etc. etc. pero ella ¿quien es de verdad
Yolanda Faar?. Yo a lo largo de las distintas funciones de teatro que he llevado a cabo con ella he descubierto a una mujer sensible, extremada mente sensible, una mujer con los campos de la liberad diseminados por la tierra, una actriz con coraje, una mujer con conciencia de si misma, de saber quién es, y que lugar ocupa en esta vida, Una atracción fatal me seduce de ella, en sus ojos veo un halo de melancolía y tristeza y a veces desesperanza, pero su voz pausada me calma y me dice "no pasa nada" "no pasa nada Manu" todo es como tiene que ser, me alienta, me reconforta, sus movimientos de bailarina me invitan a mirarla, a observarla, y enciende un pitillo y con voz profunda me dice ¿como te encuentras? ¿estás bien?. Ella ya sabe que algo pasa, ella ya ha perforado en mis emociones y se da cuenta de que algo no va bien.
Entre escena y escena armamos puzzles, y grandes pintores nos visitan
Monet,
Gauguin, Matiss, Rembrandt...Y cada vez que colocamos una pieza, parece que se nos coloca algo dentro, parece que las cosas, aunque no lo creamos, están bien. Porque así queremos que sea, porque así queremos que suceda.¿verdad Yolanda?
Yo sólo tendría, casi la plena potestad para hablar de como la conocí, fue haciendo una función "Tres Sombreros de Copa" de
Miguel Miura, en el teatro príncipe de Madrid, hay una cierta similitud de este teatro a la relación que yo tuve con ella, para acceder a los camerinos había que bajar tres tramos de escaleras, practica mente estábamos mas cerca de magma que de la superficie, y nuestra relación se convirtió, por mi parte en un descubrimiento profundo y sosegado de algunos aspectos de mi vida.
Gracias Yolanda, gracias...