¡¡¡Buenas de nuevo!!! Estoy super feliz de estar de vuelta en el blog. Sí, ya sé, he estado un poco muy perdida por estos lares, pero es que he estado (y estoy) embarcada en un par de proyectos que me tienen muy absorbida.
Pero estoy de vuelta y es motivo de alegría y celebración para mí. He de decir que por los motivos que dije antes, no publicaré tanto como lo hacía antes...quizás una vez a la semana esté bien. Y como siempre, seguiré con mi compromiso con LAS DIOGENERAS todos los meses y con las entradas que hacemos los martes.
Dicho esto....vamos al post de hoy. Todos sabréis ya a estas alturas que tengo dos gatitas: Luna y Perla. Luna, romanilla, de color ceniza, un poco arisca...y Perla, blanca de ojos azules y muy cariñosa. Pyssla me ha vuelto a inspirar...buscando en la web cosillas para hacer...topé con un patrón de un gatito y a mi cabeza vino Perlilla.
Para quien no la conozca...ahí va la susodicha:
Ambas gatitas son adoptadas de la calle. Son dos más de la familia, muy integradas, ya que se adoptaron cuando apenas eran dos cachorros, y son limpias y buenas. Luna es más independiente y tranquila...y Perla es...bueno, una perla, jajaja.
Mi hermano me ayudó a hacer este proyecto, veréis sus manos en las fotos y además, me dijo un truco muy bueno para ir cogiendo y colocando los beads: ¡¡¡con la punta afilada de un lápiz!!!