"Perros con huaches en Puente Alto"

Por Losperrosdelcamino
Hoy en la mañana me envían unas fotos a mi correo, avisándome que habían sido subidas a una supuesta página de perros, donde informaban que eran de Pirque, y que  habían como diez perros con huaches. Por supuesto que me preocupé, por que en todo lo que yo ando en el camino, gracias a Dios, en este momento no tenemos perros con huaches o trampas para conejos.  Y de haberlos intentamos sacarlos de inmediato si se puede.
Grande fue mi asombro al ver que las fotos no eran de los perros del camino.  Por la tarde me contacto con la pagina, les pido que por favor  me informen en que lugar del camino están los diez perros con huaches?, a lo que me contesta Jonathan, diciendo que solo el sabe donde están y solo sabe llegar al lugar. Entonces le pido que me lleve. Dejo todo lo que tenía por hacer, con tal de ir lo antes posible, para que esperar el domingo.   Después de perder como media hora en que tomara la desición,  nos quedamos de juntar en Las Torres con Av. La Florida. Al momento voy  siguiendo detrás de la camioneta blanca pequeña de dos puertas traseras. Me lleva a un lugar donde hay una villa de casas casi recien entregadas, justamente por donde vive una de mis amigas.   Me extraña que haya dicho que los perros con huaches eran del Cajón, o Pirque, cuando en realidad son de la comuna de Puente Alto. ¿Por que la mentira?
Llegamos a un lugar donde está el colegio Alicante, por su infraestructura y el  movimiento que veo, se ve que es un colegio particular y tal vez caro en mensualidad a pagar por su educación.
Justo en frente del colegio están los perros hechados tomando sol.  Miro hacia alrededor, por la vista del sector, deduzco que son los mismos perros abandonados que estaban el año pasado en el Cerro La Ballena de Puente Alto. Hoy gran parte de los sitios eriazos, están ocupados por casas de villas nuevas, donde las casas no son nada de baratas. Y lo que es mas irrisorio, es que al frente de donde están los perros, hay una clínica veterinaria.

Me asombra sobre manera que los perros estén en ese lugar, lugar donde pasa mucha gente yendo y viniendo al colegio, autos que llegan y salen, y lo que es peor, no hay nadie que se detenga a mirar a los perros que allí yacen observando cada detalle de lo que se vive.
Se ven dos perros negros, casi desnutridos, observando sus patas, si tienen huaches. Un poco mas retirado está este otro perro que se ve de inmediato que no debe tener mas de ocho meses, pero lamentablemente carga en su pata izquierda hinchada alrededor de tres huaches.

Un poco mas hacia el sur nos mira de reojo otro perro color beige  temeroso no nos quita la vista de encima.  Sigo preguntandome, cómo es posible que allí existan perros con sus patitas hinchadas de dolor por un huache y nadie antes los haya visto, y menos hacer algo por esos inocentes.
A veces duele ser humano, y lo que es peor, de aquellos humanos insconcientes, que solo miran su metro
cuadrado sin importarle el que está al lado. ¡Que les va a importar un perro quiltro abandonado!

Los perros al cerciorarse que estamos ahi por ellos, arrancan. Luego hay uno negro con un huache en una de sus patas, se acerca al olor de la comida, mientras los otros brillan por su ausencia. El rato pasa y pasa.

La persona que me acompaña es un joven principiante en lo que se refiere a perros abandonados, pero con ganas, veo que no tiene idea como intentar atraparlos, le explico lo que tiene que hacer y como hacerlo, le paso una cuerda, algo rico para llamar la atención de alguno de los perros.  En eso llega Cristián, un señor que vive cerca del lugar al cual si le preocupan los perros, poniendo todo de su parte para que podamos agarrarlos, la misión no da frutos. Habían pasado casi dos horas esperando que se acercaran. El negrito come y come, pero siempre a la defensiva. Cuando de repente Jonathan grita que atrapó a uno, Cristián corre a buscarlo, le ponemos bozal, y mientras ellos lo asujetan, con todo el cariño posible y cuidado, ya a oscuras, con linterna en mano,  logro sacar  tres huaches de sus dos patas.  Fueron casi tres horas para lograr ayudar aunque sea a uno de ellos.

Mi piel transpira como si fuera la primera vez que lo hiciera, pero son cientos y cientos las veces que he realizado esta delicada y triste misión, pero hoy, gracias a tres personas, hay un perro abandonado que  sentirá alivio al pisar al no sentir el cruel dolor de un huache incrustado. Además de haberse servido un tarro de pasta que andaba en  mi auto, comida rica, y hasta tocino ahumados. Guatita llena corazón contento.
Aun quedan mas, hay que tener vocación, dedicación, ganas y tiempo para poder ayudarlos. Quizás si hay algún veterinario que tenga las ganas de querer hacerlo por favor comunícate conmigo lo antes posible.
Aqui hay mucho mas que un trabajo de veterinarios, debe existir amor por lo que hacemos y especialmente a quién se lo hacemos.
Ahora de ti depende si eres un veterinario especializado en perros, que los perros abandonados que están en la comuna de Puente Alto puedan tener una oportunidad. Personalmente tengo todo lo necesario para hacerlo, pero sola imposible.
Marcela
losperrosdelcamino@gmail.com

Los perros del camino?... son todos aquellos que de una u otra manera estando perdidos o abandonados, Dios los pone en mi camino cuando paso...y algo me dice: tienes que detenerte, no puedes seguir...