La verdad es que poco se puede contar de Jesús Hermida que no hayan dicho ya los incontables obituarios y perfiles publicados en los medios. Tampoco tengo edad para haber vivido en directo el momento en el que nos contó cómo el hombre llegaba a la luna. Pero sí recuerdo algunas de sus entrevistas, las chicas Hermida, algunos de los programas que presentó y su característica forma de hacerlo con esa sacudida de cabeza que popularizaron después Martes y 13.
Por aquellos años yo no era aún muy consciente de que acabaría siendo periodistas, pero tenía periodistas en casa y veía a Hermida como todo un revolucionario. Entró en TVE como corresponsal en Nueva York y ahí empezaría una carrera que cambiaría para siempre el periodismo televisivo en nuestro país. Presentó informativos, dirigió cadenas de televisión y hasta fundó la Academia de las Artes y las Ciencias de la Televisión.
Es una pena que el periodismo televisivo que él nos trajo ya prácticamente no exista en la televisión...
Quedémonos con lo que podemos aprender de él que es mucho.