Hay cosas que no se entienden.
Por aquí el técnico del Corinthians, Tite, tanto cuidó a Paolo postergando ponerlo para que en este partido juegue un poco, lo pateen y ahora -probablemente- no juegue contra Argentina.
Sin ánimo de quitarle mérito a Arango, el arquero peruano, indeciso, vió cómo pasa el balón por su lado: Venezuela adelante en Lima. Aunque después le saca una bola al mismo Arango, siempre se recordará el gol que se comió.
Perú sale el segundo tiempo decidido a voltear el partido y lo consigue tan rápido, tan eufórico y tan contundente que llega hasta a infartar a un hincha en el estadio: remontada 2 a 1 y a sufrir, porque aunque le expulsaran un jugador igual llegaban a nuestra área.
Ah, y no me puedo olvidar del locutor del estadio, en la transmisión de aquí no reconocí quién era: el árbitro pidiendo un minuto de silencio y el compadre hablando y hablando, y el árbitro esperando que alguien lo calle.
El martes Argentina con el mejor del mundo en el Nacional de Lima.
Leo que Goycochea (¡grande Goyco'!) declara que no es utopía que Perú le gane a Argentina. Sugieren desde Lima que Retamozo se pegue a Messi como Reyna a Maradona en el '85. Otros más avezados que le entre como Camino le entró a Navarro: ¡noooo por favor! Ese espíritu asesino contra Messi -ni contra los otros diez- no. Ahh.... todavía recuerdo al hdp del brasileño Arpi Fliho que sólo le sacó amarilla.
La noche del martes Lima tiene que ser una fiesta.