LOS DOS HIMNOS MAS HERMOSOS DEL MUNDO SON DE PERÚ Y FRANCIA :
- LA MARSELLESA ( FRANCIA)
- yo Vamos hijos de la patria, El día de gloria ha llegado. Contra nosotros la tiranía, Se levanta el estandarte sangriento (bis). ¿Oyes en el campo? eructa estos feroces soldados Vienen a tus brazos, mata a tus hijos, a tus compañeros ¡A las armas ciudadanos! Entrena a tus batallones! Vamos a caminar que la sangre inmunda está regando nuestros surcos.
- II ¿Qué quiere esta horda de esclavos? ¿De traidores, de rey conspirador? Para quien estos grilletes viles, Estos hierros siempre preparados? (Aa) Francés! para nosotros, ah! ¡Qué indignación! ¡Qué transportes debe excitar! Somos nosotros los que nos atrevemos a meditar. ¡Para volver a la antigua esclavitud!
- III Qué! cohortes extranjeras ¡Sería la ley en nuestros hogares! Qué! estas falanges mercenarias ¡Derrotaría a nuestros orgullosos guerreros! (Aa) Dios de Grans! por manos encadenadas Nuestras frentes bajo el yugo. Los déspotas viles se convertirían en ¡Los maestros de nuestros destinos!
- IV Tiemblan, tiranos! y tú, pérfido, El oprobio de todas las partes, Temblar! tus proyectos de parricidio Finalmente recibirá su premio (bis). Todo es un soldado para pelear contigo. Si caen, nuestros jóvenes héroes, La tierra produce nuevas. Contra todos ustedes listos para pelear.
- V Francés! en guerreros magnánimos Use o mantenga sus disparos. Salva a esas tristes víctimas Con arrepentimiento, armándonos contra nosotros. (Aa) Mas el déspota sangriento Pero los cómplices de Bouillé, Todos esos tigres que no tienen piedad. Rasgar el pecho de su madre.}
- VI Entraremos en la carrera, Cuando nuestros mayores ya no estarán allí. Encontraremos su polvo Y los rastros de sus virtudes. (Aa) Mucho menos celosos de su supervivencia. Que compartir su ataúd, Tendremos el sublime orgullo. Para vengarlos o seguirlos.
- VII Amor sagrado de la patria. ¡Dirige, apoya nuestros brazos vengativos! Libertad, querida libertad! ¡Lucha con tus defensores! (Aa) Bajo nuestras banderas, esa victoria. ¡Ve a tus acentos masculinos! Deja que tus enemigos expiren Mira tu triunfo y nuestra gloria.
HIMNO NACIONAL DE PERÚ :
- Coro
- ¡Somos libres! ¡seámoslo siempre!
- Y antes niegue sus luces el Sol,
- Que faltemos al voto solemne
- Que la Patria al Eterno elevó.
- Estrofa I
- Largo tiempo el peruano oprimido
- La ominosa cadena arrastró
- Condenado a una cruel servidumbre,
- Largo tiempo en silencio gimió.
- Mas apenas el grito sagrado:
- ¡Libertad! en sus costas se oyó,
- La indolencia de esclavo sacude,
- La humillada cerviz levantó.
- Estrofa II
- Ya el estruendo de roncas cadenas
- Que escucharon tres siglos de horror
- De los libres, al grito sagrado
- Que oyó atónito el mundo, cesó.
- Por doquier San Martín inflamado,
- ¡Libertad! ¡libertad! pronunció:
- Y meciendo su base los Andes,
- La enunciaron también a una voz.
- Estrofa III
- Con su influjo los pueblos despiertan
- Y cual rayo, corrió la opinión,
- Desde el Istmo a las tierras del fuego
- Desde el fuego a la helada región.
- Todos juran romper el enlace,
- Que Natura a ambos mundos negó,
- Y quebrar ese cetro que España
- Reclinaba orgullosa en los dos.
- Estrofa IV
- Lima, cumple su voto solemne,
- Y severa su enojo mostró,
- Al tirano potente lanzando,
- Que intentaba alargar su opresión.
- A su esfuerzo, saltaron los hierros
- Y los surcos que en sí reparó
- Le atizaron el odio y venganza
- Que heredó de su Inca y Señor.
- Estrofa V
- Compatriotas, no más verla esclava
- Si humillada tres siglos gimió,
- Para siempre jurémosla libre,
- Manteniendo su propio esplendor
- Nuestros brazos, hasta hoy desarmados,
- Estén siempre cebando el cañón,
- Que algún día las playas de Iberia,
- Sentirán de su estruendo el terror.
- Estrofa VI
- Excitemos los celos de España
- Pues presiente con mengua y furor
- Que en concurso de grandes naciones
- Nuestra patria entrará en parangón.
- En la lista que de estas se forme
- Llenaremos primero el renglón,
- Que el tirano ambicioso Iberino,
- Que la América toda asoló.
- Estrofa VII
- En su cima los Andes sostengan
- La bandera o pendón bicolor,
- Que a los siglos anuncie el esfuerzo
- Que ser libres, por siempre nos dio.
- A su sombra vivamos tranquilos,
- Y al nacer por sus cumbres el Sol,
- Renovemos el gran juramento
- Que rendimos al Dios de Jacob.