Esta vez me he servido de los petit que toma Ana, mi pequeñina, para servir esta maravilla de dulce que nos presenta Sandra en su libro "Las recetas de la felicidad". Me encanta reciclar y esta vez veis uno de mi "pequeño" síndrome de diógenes.
- 200 ml de nata de montar (con más de un 35% en materia grasa).- 100 grms de azúcar.- 100 grms de chocolate Lindt con más de un 70% en cacao.- 200 grms de queso de untar.- 1 cucharada de cacao puro en polvo.
Preparación:
En una cazuela calentaremos la nata con el azúcar, removeremos de vez en cuando para la completa disolución del azúcar. Cuando hierva, retiraremos del fuego y añadiremos el chocolate troceado. Dejaremos que repose unos minutos y removeremos hasta que consigamos una crema homogénea. Añadiremos el cacao puro tamizado y el queso cremoso. Removeremos hasta que no queden grumos y obtengamos una crema lisa. Repartiremos la mezcla en vasitos y los meteremos en la nevera hasta que cuajen, unas dos horas.