Paralelamente a la dolarización de los precios que ocurría el Gobierno de Venezuela fue preparando el camino para las recientes medidas económicas del 20 de agosto de 2018: creó el Carnet de la Patria con la intención fundamental de personalizar subsidios y creó la criptomoneda el Petro con la característica de estar “pre-minada” por lo que tiene una emisión limitada y controlada, lo que debe asegurarle el mantener la proporción de su valor frente a otras monedas como el dólar y el euro. Parece entonces que la dolarización de la economía venezolana ha sido bien calculada por las autoridades, economistas y asesores económicos del gobierno venezolano. El libre acceso a divisas que ahora tendrán los venezolanos naturales o jurídicos y donde no participará como ofertante el Estado Venezolano, deberá garantizar mantener las reservas internacionales del país y sus actividades económicas y programas sociales e incrementar su actividad productiva. Todo debería garantizar a su vez mantener el valor de la nueva moneda venezolana el Bolívar Soberano. Lea también Petro Y Bolivar Soberano ¿una Combinación Perfecta?
Por primera vez en mucho tiempo economistas opositores y chavistas están bastante de acuerdo en que el conjunto de medidas económicas son acertadas. Los venezolanos esperamos que estén en lo cierto. Habrá sin duda un impacto en muchos “sectores económicos” que deben adecuarse rápidamente en tecnología, eficiencia productiva y regularización fiscal. Esto es natural en una economía que fue casi totalmente desvirtuada. Es un gran reto el que enfrentan los venezolanos y su país. Continuaremos los análisis desde la perspectiva de un ciudadano común.