En 2009 el Ayuntamiento de Madrid se gastó 4,6 millones de € en remodelar la Puerta de Sol. Apenas transcurridos cuatro años, ya hay nuevos planes para esta céntrica plaza madrileña: ayer se inauguró el concurso internacional de ideas para volver a reformarla, #PiensaSol. Una competición arquitectónica cuya cuantía en premios que asciende a 39.000 €. Un gasto que sin contar los gastos de la página web, campaña de comunicación, la maqueta gigante de cartón, etc. ya nos habla de la magnitud de tamaña estrategia. Pero más allá de las lógicas dudas que tanto boato nos pueda sugerir, cabe preguntarse si un proceso de estas características puede ser simplemente acometido desde la perspectiva del diseño, o si un concurso de arquitectura es la mejor fórmula para responder a las necesidades de la ciudadanía, principal destinataria de este tipo de intervenciones.
Además este concurso se viste de un perverso proceso pseudo-participativo, que plantea muchos claroscuros desde el inicio. Por una parte están los canales y metodología empleadas: un cuestionario de tres preguntas que limitan radicalmente la manera en la que la gente puede condicionar la futura intervención. Es decir, eso es una encuesta dirigida a un objetivo concreto, no un proceso de participación (también se ha hablado de ampliar la participación preguntando a las personas que regentan los kioscos, como si supusiera un gran avance para una toma de decisiones colectiva...). Por otra, está el lenguaje y los términos utilizados. Una cuestión transcendetal, que como ya hemos hablado en otras ocasiones, determina en gran medida la manera la participación. Así, cuando animan a la gente a participar a través de las redes sociales, lo hacen utilizando expresiones como «queremos oír vuestra opinión» (ni siquiera «escuchar» nuestra opinión), lo que establece un estrecho margen para que el proyecto de respuesta a las necesidades de la ciudadanía. Y, finalmente, está la opacidad del propio proceso. Ayer hubo una presentación pública pero la convocatoria, de la cual era muy difícil conocer detalles sino formabas parte de la organización del concurso o las instituciones y empresas promotoras, fue puro teatro ya que hubo una inauguración oficial previa a las 12.00.
.@COAM_MTT Participación ciudadana no es "oír todas las voces", si no construir procesos de decisión colectiva desde la base #PiensaSol
— Paisaje Transversal (@paistransversal) September 28, 2013
Por si esto fuera poco, este supuesto proceso participativo parece que apunta a la legitimación una intervención que seguramente, y vista la configuración del jurado (arquitectos españoles del star system internacional, la Directora Ejecutiva de los premios Pritzker, la Alcadesa y el Presidente de la Comunidad de Madrid), tenga más que ver con el ideal haussmaniano de contención de las protestas a través de operaciones urbanísticas, el fomento de la arquitectura espectáculo y con la continuación de la estrategia de privatización emprendida por la Comunidad y el Ayuntamiento de Madrid —¿acaso ya no nos acordamos que la parada de metro de Sol tiene ahora nombre de compañía telefónica?—; que con generar de esta emblemática plaza un espacio de convivencia, la forma política que puede garantizar la equidady un ámbito para la «construcción de opinión pública», que diría Habermas. Sabemos que eso no interesa en absoluto, ya que la alienación es la pauta para el diseño del espacio público hoy en día. Ideas no es lo que faltan, lo que se necesita es la voluntad (técnica, política, económica) de (re)construir ciudad de otra manera.
Estamos siendo testigos de como las plazas de nuestras ciudades y pueblos se convierten en espacios de tránsito dirigido al consumo, un mero escaparate de la sociedad del espectáculo que atenta contra todas las cualidades propias del espacio público: la convivencia, la cohesión social, el intercambio, el juego, la solución de los conflictos, el marco para la protesta y reivindicación social, etc. Las cada vez más comunes plazas duras (Sol, Callao o Dalí en Madrid, por ejemplo) son espacios de control, que bajo la del abaratamiento de costes de mantenimiento, están dirigidas a despojar de cualquier atisbo de humanidad de nuestros entornos urbanos.
¿Necesita Sol una remodelación? Desde luego, es uno de los espacios público más inhóspitos que puedan existir. Pero, como se suele decir: así no. Rotundamente no. ¿Acaso la historia más reciente de la arquitectura y el urbanismo, la burbuja inmobiliaria o las tres candidaturas olímpicas consecutivas fallidas no han sido suficiente para aprender que Madrid no puede seguir construyéndose basándose en el despilfarro y la arquitectura icónica?
En 2012 la Puerta de Sol fue PremioEspecial de Espacio Público Europeo gracias a la Acampada del 15M.Con este galardón se otorgaba el reconocimiento que tuvo este acontecimiento como verdadero motor de generación de espacio público, la plaza como espacio de intercambio y relación. El veredicto destacaba a la #AcampadaSol como «demostración masiva de ciudadanos que reclaman la mejora del sistema democrático a través de una acampada temporal en una de las plazas más representativas de Madrid». Por eso fue más que un premio: fue la primera vez en la que los intangibles sociales y culturales tomaban la delantera al diseño en un concurso de arquitectura y urbanismo. Todo un hito, una conquista ciudadana. Pero estos no son los parámetros que interesan para este concurso, ni mucho menos.
Vista esta situación, ¿podemos pensar en una contra propuesta para la apropiación ciudadana de Sol? ¿Podemos generar una propuesta en la que ciudadanía, movimientos sociales y técnicos podamos dar forma a un proceso en el que tenga como objetivo dar verdadero sentido a esta plaza como espacio público?
Si un proyecto arquitectónico y privatizador para la plaza de Taksim en Turquía fue la mecha que prendió las protestas de #OccupyGezi, ¿puede convertirse #PiensaSol un nuevo punto de unión para defender lo público y lo común frente a la especulación y la privatización?
Si es así, pensemos Sol. ¿Quién se apunta?
Créditos de las imágenes:
Imagen 1: Vista aérea de la Acampada Sol durante mayo de 2011 (fuente: http://bitacoraanarquista.files.wordpress.com/)
Imagen 2: Cartel de #PiensaSol (fuente: Madrid Think Tank/Metalocus)