Josep Piqué fue uno de los ministros más brillantes de Asuntos Exteriores de José María Aznar, y aunque le criticaran sus inclinaciones de cabeza ante George W. Bush, él no ocupaba ese cargo cuando se produjo la invasión estadounidense de Irak en 2003 con apoyo verbal español.
Compañero de gabinete de Mariano Rajoy durante los dos gobiernos aznaristas, tras dejar el PP en 2007, asegura que no volvería a la política porque, aunque es una pasión viral sin antídoto, quiere centrarse en su actividad empresarial.
Por eso, y contestando a una pregunta de este cronista, aseguró que le daría un “no rotundo” a su excompañero y actual primer ministro si le propusiera entrar en su Gobierno.
Piqué, que ha ganado relevancia como exitoso presidente de la compañía aérea de bajo coste Vueling, acaba de concentrar su experiencia como político que fue de izquierdas y de derechas, economista, empresario y líder del Círculo de Economía catalán, en un libro que debe leer quien desee investigar sobre el futuro mundial, y naturalmente español.
“Cambio de era. El mundo en movimiento: de norte a sur y de oeste a este”, Ediciones Deusto, es un magnífico tratado de política y economía, pero también de prospectiva.
No estamos ante un cambio coyuntural planetario, sino ante uno de era, un nuevo paradigma político-económico-social.
De momento parece que Europa va quedándose detrás de las pujantes economías que van hacia el Este y que tienen como centro el Pacífico, el estrecho de Malaca. Piqué propone cómo adaptarse al cambio.
O Europa despierta, incluyendo una España que debe actualizar su Constitución, pero no a costa del “derecho a decidir” del nacionalismo catalán, o se quedará atrás, sin influencia en un mundo en el que hasta África despierta con pujanza.
SALAS