Pisa: La ciudad de la torre inclinada

Por Vagabond

Mencionar Pisa es recordar inevitablemente su torre inclinada ya que precisamente por esta fatalidad constructiva esta ciudad es una de las más famosas y visitadas en todo el mundo. De hecho, el perfil de la ciudad está dominado por esta torre pero absolutamente ninguna foto les prepara para lo que encontrarán y es que el grado de inclinación es realmente sorprendente, casi surrealista.


Las historias sobre el porqué del “desastre” constructivo son diversas. Algunas afirman que simplemente se debe al terreno de Pisa, arcilloso y poco adecuado para la construcción de un monumento de dimensiones similares sin tomar las precauciones adecuadas. Otros afirman que se debe a que en los cimientos de la torre se encuentra tierra santa, traída y colocada allí pero no se tuvo la prudencia de esperar a que la misma se asentará adecuadamente integrándose con la tierra del lugar.
De una forma u otra, lo cierto es que el lugar es mágico. Eso sí, olvídense de tirarse una foto a solas con la torre porque lo mismo en verano que en las noches con el frío más atroz, estos lares siempre están llenos de turistas.


Una vez que la mirada se acostumbre a la torre inclinada comenzaremos a apreciar las otras bellezas de la Plaza de los Milagros. Entonces veremos la Catedral de Santa Maria Assunta y el bautisterio, el más grande de toda Italia. Obviamente, todo el conjunto de mármoles blanco es impresionante.


Justo en la calle principal que pasa por Plaza de los Milagros hallarán la posibilidad de comprar los souvenir más diversos, desde una réplica del conjunto hasta una camiseta alegórica.


No obstante, sería un pecado visitar Pisa y quedarse solo con esta imagen. Puede visitarse la Plaza de los Caballeros donde sobresale el Palacio del Reloj y la Iglesia de Santo Stefano dei Cavalieri, verdaderas reliquias del renacimiento.
En el Museo de las Naves antiguas hallarán una verdadera sorpresa histórica que ha hecho a más de un especialista hipotetizar que en tiempos remotos existió una Pompeya marítima. Se trata de un conjunto descubierto hace muy poco de unas 30 naves provenientes de los siglos III a.C. y VII d.C. que conservaban casi intactos sus tesoros de joyas, monedas y ánforas.
La Pisa moderna y chic se desvela en Borgo Stretto, un sitio donde el tiempo pasa volando entre las boutiques, los restaurantes y los pequeños negocios que tienen la impronta local. En las noches no dejes de visitar el Caffè dell'Ussero para que pruebes un sorbo de la vida pisana.