Hoy vengo con unas pizzas terroríficas, y es que con Halloween a la vuelta de la esquina se me ha ocurrido daros unas ideas para que podáis hacer de esa noche algo divertido y que a los niños de la casa seguro les encanta, ya que ellos pueden colaborar en la cocina.
Estas pizzas como veis están llenas de arañas y están terriblemente deliciosas. Son muy fáciles de hacer, con pocos ingredientes y como os digo a los niños les encantan.
¡¡A ponerse el delantal!!
Ingredientes para doce mini pizzas.- Masa fresca para pizza.- Tomate frito casero.- Orégano.- Aceitunas negras sin hueso.
Precalentar el horno a 200º y cubrir la bandeja del horno con un papel de horno.
Extender la masa de pizza y con ayuda de un cortapastas hacer "mini-pizzas" del tamaño que se quiera. Yo en esta ocasión las hice de un tamaño mediano pero podéis utilizar el tamaño que queráis.
Colocar las "mini-pizzas" en la bandeja del horno. Poner un poco de tomate frito encima de cada una y extenderlo con cuidado. Poner un poco de orégano.
Para hacer las arañas, coger una aceituna negra y partirla por la mitad a lo largo. Una parte de la aceituna será el cuerpo de la araña. Colocar el cuerpo encima de la pizza con la parte hueca de la aceituna hacia abajo. La otra mitad vamos cortando las patitas de la araña. Se debe cortar la aceituna a lo ancho. Colocar las patitas al lado del cuerpo de la araña con el lado hueco también hacia abajo. Repetir la operación en todas las "mini-pizzas".
Llevar al horno durante diez minutos o hasta que la masa esté doradita.
Servir templada.
Espero que os haya gustado y que no os haya dado mucho miedo 😉