Como al regimen franquista no le iba mucho eso de establecer un sistema general de protección social, decidió montar una campaña llamada “Ponga un pobre en su mesa”. De esta manera, trasladaba a los propios ciudadanos la responsabilidad de tratar de equilibrar las grandes desigualdades que había en la sociedad a causa de las políticas que se estaban haciendo. El estado se ahorraba costes y encima podía seguir haciendo las cosas como hasta entonces.
Berlanga se basó en esa campaña para crear la película Placido con la que retrata el pasotismo del estado y las graves carencias de valores de la sociedad. La película incluye escenas tan esperpénticas como un sorteo de pobres para que cenen en navidad en casas de familias burguesas.
Telemaratones, galas benéficas, bancos de alimentos, programas de tv en los que puedes llamar para ayudar a gente, … Joder, han pasado más de 40 años desde la peli de Berlanga y todavía seguimos sin un sistema general de protección social y tenemos que ser los ciudadanos los que nos ocupemos de los que el estado no es capaz de hacer.