Hace ya un tiempo que iba como loca buscando la famosísima Venus atrapamoscas, o como se la hace llamar en realidad, Dionaea Muscipula. ¡Es una planta preciosa! Así que en uno de los descansos que hice entre tema y tema de los exámenes, decidí mirar por internet y zas! Ahí estaba, una web con plantas carnivoras. Para mi sorpresa, no existe solo la Dionaea, sino que hay tropocientas mil variedades.
Entré en la primera web que me mostró el buscador (sí, esa de la foto de arriba :P) y me puse a mirar, investigar, y por último escoger. Evidentemente la Dionaea era una compra obligatoria pero al final también caí en la trampa de la Drosera Filiformis. La primera ya es adulta, la segunda es joven, una pulguita pero preciosa. ¿Queréis verlas?
La de los dos palitos que podéis ver en primer lugar es la Drosera Filiformis, una especie nórdica que es preciosa cuando crece pero que ahora se ve muy triste jajaja. Necesita mucha luz, un par de horas de sol directo al día como mínimo y regarla a traves del platito no directamente en la planta (poner unos dos centimetros de agua en el plato para que ella vaya absorviendo y estar siempre atento a que no se seque).
La Dionaea Muscipula, o Venus atrapamoscas, necesita por lo menos tres horas de sol directo y luz constante por eso es una planta de exterior, no la uséis para decorar en el interior porque morirá. El riego es similar al de la Drosera pero por lo que he observado absorbe el agua mucho mas deprisa así que ojo. Sobre las trampas, no hagáis la gracia de meterle algo dentro para que se cierre porque gasta energía y solo conseguiréis que la planta muera poco a poco.
Por último voy a matizaros algo super importante ¡NO LAS REGUÉIS CON AGUA DEL GRIFO! Tienen que ser regadas con agua destilada/desmineralizada. Es la misma que se usa para planchas o coches pero fijaros en la etiqueta del envase que ponga que se puede usar en plantas también. La podéis encontrar por ochenta centimos en Eroski.