Recientemente mostramos las líneas generales de los planes finlandeses sobre desarrollo sostenible. Continuamos con otra experiencia ecointeligente.
La iniciativa holandesa Transición Energética parte del gobierno y apoya el cambio estructural hacia un sistema energético sostenible a nivel nacional. Surge del reconocimiento de la dependencia no deseada de unos pocos países suministradores energéticos, así como de los impactos ambientales (en particular los climáticos) negativos derivados del actual sistema energético. Mientras que la actual política está centrada en lograr objetivos hasta el 2010, la política de Transición Energética tiene como horizonte temporal el periodo posterior a 2010.
Se ha tenido desde el principio que los cambios de sistema han ocurrido históricamente y han tenido un impacto en la sociedad y en la tecnología, pongamos por caso, el cambio del carbón al gas natural
Al principio, un proyecto de visión a largo plazo sobre la generación de energía estableció las bases de la iniciativa. Tenía originalmente el año 2050 como su horizonte temporal. La transición ocurre a lo largo de tres amplias trayectorias:
- el uso de fuentes de energías renovables
- ahorro energético
- fuentes energéticas fósiles más limpias y uso de tecnologías avanzadas
El enfoque de transición se aplicó inicialmente por parte del gobierno en tres ámbitos temáticos: gas, eficiencia industrial y biomasa.
Tanto el gobierno como los actores sociales y las empresas comenzaron a realizar proyectos en esas áreas y desarrollaron visiones comunes, diseñaron trayectorias de transición e iniciaron experimentos para comenzar con esas trayectorias. Posteriormente emergieron 23 trayectorias, con más temas que los tres mencionados. Esas trayectorias se agruparon en siete grandes temas, que actualmente constituyen siete direcciones de la política energética a largo plazo de Holanda.
Cada tema tiene su propia plataforma de transición, que tienen la tarea de desarrollar una visión (2020 – 2050) para su tema, formular una trayectoria de transición que permita su realización y aporte los primeros pasos a tomar. El objetivo es que esto cree un potencial innovador en Holanda así como identificar cuellos de botella en la política.
Las actuales Plataformas para la Transición son:
- Movilidad sostenible
- Materias primas verdes
- Eficiencia en la cadena de producción
- Nuevo gas
- Suministro eléctrico sostenible
- Energía en el medio ambiente construido
- Invernadero como fuente energética
Cada plataforma está formada por participantes en el mercado, organizaciones científicas y civiles así como el gobierno. Como tal, constituyen marcos público – privados para la cooperación que se centran en lograr un suministro energético sostenible.
Aparte del sistema energético, el gobierno aplica también el enfoque de la transición en otras áreas en las que es deseable un cambio estructural: transición hacia la agricultura sostenible, la movilidad sostenible y la biodiversidad. Todas las trayectorias de la transición tienen en cuenta el triple balance para el desarrollo sostenible común: crecimiento económico, desarrollo social y requerimientos ambientales.
¿Recuerdas el ejemplo de Amsterdam Smart City?