Plátano

Los Plátanos son unas frutas creadas sintéticamente por masones y el Nuevo orden mundial y los judios.
La clave está en el potasio.
Desde tiempos de la Alemania nazi se tiene conocimiento de lo que puede ocasionar en el humano. Este químico utilizado actualmente como fertilizante, provocar un infarto y la muerte en ejecuciones o alterar cromosomas.
Fue visto por Hitler como un método eficaz para dominar a la población. Ya fuese para alterar el ADN o controlar la superpoblación, pero los rusos entraron en Berlín y se jodió la cosa. Puede sonar absurdo, pero el potasio al igual que el plomo, degenera el organismo de a poco.
Aunque es cierto que este químico tiene cosas buenas, también se ha visto que puede generar cáncer, osteoporosis y daños en el cerebro que impiden ciertas conexiones cerebrales.
Historia
Fueron creados a finales de los 50 para introducir agentes químicos en la población por razones aun desconocidas. Pero si algo es seguro es que nada bueno hay detrás de eso. Si así fuese no lo ocultarian.
Tras una multitud de diseños fallidos y rediseños, se optó por la actual. Al contrario que muchas frutas, se optó por un diseño con abrefácil y sabor dulce para enganchar al máximo numero de víctimas.
La forma fálica del diseño fue creado por un componente del proyecto que estaba un poco salido. Bueno, bastante. Años después fue despedido por intentar tener relaciones sexuales con una aspiradora. Finalmente murió al hacerse una paja y beberse dos vasos de agua.
Para no levantar sospechas y crear millones de unidades, el gobierno optó como base de operaciones lo más alejadas posibles. El problema es que todas tenían dueños y si las invadias te disparaban. Asi fue como crearon una serie de islas artificiales en el Atlántico con la colaboración de Marruecos.
Le pusieron de nombre Canarias y el régimen franquista hizo el resto.
Rellenó los libros escolares con una supuesta historia volcánica y que Colón pasó por alli. Los universitarios y docentes que no pasaron por el aro fueron purgados y sus cadáveres arrojados en una cuneta. Personas que, por cierto la Ley de Memoria Histórica ha olvidado.
Miles de turistas son desviados a multitud de destinos y les dicen que aquello es Canarias. Pero la realidad es que estas islas son simples plataformas que solo contienen centros industriales plataníferos. De vez en cuando mandan a habitantes del tercer mundo al resto de España (latinoamericanos retrasados mentales principalmente) para hacerlos pasar por autóctonos. Más adelante se creó el Mojo Picón y para promocionarlo se contrató a Caco Senante, un cubano que se hace pasar por habitante de las islas. Para seguir con la coartada, también se contrató a un venezolano llamado José Vélez y a un murciano llamado Braulio.