Playa para hoy…

Publicado el 24 abril 2011 por Carmentxu

“Cómprame una, así no tendré que trabajar mañana”. La frase, que en su día me enarcó las cejas en un acto totalmente reflejo y se me quedó grabada en la retina, corresponde a un vendedor de muñecas artesanales hindú. Pensé momentos después en cuánto derrotismo dentro de esa frase, cuanta falta de interés por el futuro, por mejorar, superarse… la de aquel hombre joven. “Si hoy me vendes una, y mañana otras dos a otros tantos, no sólo podrás comer, sino mejorar tu calidad de vida”, seguí dando vueltas. Pero eso no importaba al vendedor, que en cuanto tuvo ocasión se descubrió como un hábil comerciante pese a su escasa dosis de ambición, tan famélica como su figura. Pensé qué diferentes éramos los occidentales, siempre compitiendo, luchando contra gigantes por mejorar, sobresalir y por encontrar, al final, un lugar en este mundo, aunque sea en el cementerio.

Forges

Hoy, años más tarde, vuelvo a recordar a aquel hombre, que seguramente ha seguido comiendo cada día gracias a los turistas, más rosados, gordinflones y exhaustos por la extrema humedad que nunca por contraste con la población local. Pero le veo tan vulnerable a las inclemencias como a este trozo de occidente en que estamos, bendecido por la climatología, por bellos paisajes y kilómetros de arena frente a un mar cálido y azul que ahí está cada día sin el más mínimo esfuerzo por nuestra parte. Sólo hay que vender una marioneta para comer mañana.