Pero claro, una es que no se lanza, le pueden las responsabilidades y al final no da el ansiado paso, algo que, afortunadamente, no le ocurre al resto de la humanidad. Para muestra, este pedazo de botón que se llama Noemí Martínez, recién estrenada concejala del Partido Popular en el Ayuntamiento de Manises (Valencia) y que se ocupa de un área tan intensa en tiempos como el que corren como Bienestar Social.
Pues resulta que la colega (y lo cuento porque entiendo que gran parte de este mundo no conocerá el caso ni falta que le hace) a mitad del segundo pleno del mandato se pira, coge la guagua y se planta en Madrid para ir al plató de Salvame Deluxe a sentarse tras su adorado Kiko Matamoros (ahí la pueden ver, de verde, tras el individuo ese). Pues la señora o señorita Martínez, que al parecer cobra unos 36.000 euros anuales, no solo no se avergüenza de haberse desmelenado junto a Jorge Javier mientras se pasa por el que te dije las obligaciones recientemente adquiridas, sino que se esponja como una esponja ante el apoyo de sus compis de gobierno, que aplauden que la edil salga detrás de Matamoros en un programa del caché del mencionado.
En algunos municipios los plenos se cambian de fecha para promover la participación ciudadana o, por el contrario, para impedir que se produzca. ¿No podría señor alcalde de Manises ponerlos otro día para que Noemí pueda compatibilizar su vida profesional con su vida…profesional?