Le acompañan sus amigos, Pato, Elly, Pajaroto y su mascota Loula, lo cual prueba lo fumado que está el niño.
En cada capítulo, una voz misteriosa producto de la paranoia de éste le hace preguntas estúpidas.
Fue el producto audiovisual español con mayor recaudación, lo cual prueba que cuando hay dinero de por medio se pueden explotar a los niños. Generó tropecientos millones de Euros.
Desde que dejó de robar macetas de marihuana por las guarderías ya no ha vuelto a ser el mismo. Mientras tanto su madre, Pocahontas, sigue dándole al tambor, como un pianista manco.