Nuestros políticos pegan sus fotos en tablones para que no se les caiga la cara de vergüenza
Basta con sentarse frente al televisor u ojear portadas en el quiosco para exponerse a su manipulación y anestesia. Basta con un inocente viaje en autobús, metro o tren para escuchar a algún desconocido repetir lo dicho por cierto tertuliano, tal vez criticar a un tal Pablo Iglesias. El mismo Pablo Iglesias que lidera Podemos y que, según los políticos de bien, ha negociado en secreto con terroristas y comunistas de medio mundo para acabar con ellos, con "la casta" española. ¿Casta? Prefiero "lacra". Y ahí estoy de acuerdo, porque visto lo visto, si esas encuestas están en lo cierto, no creo que sea el mesías que este país se merece. Es más, este país no se merece a alguien como él. Tal vez sea mejor mi tocayo Rivera, antes líder de Ciutadans y ahora de Ciudadanos, un hombre querido por cámaras, flashes, empresarios, banqueros y ultraderechistas tal y como publicó incluso The Guardian.Mientras que Pablo Iglesias ha logrado devolver la esperanza a personas que la habían perdido, ganas de pelear por lo que debería ser nuestro, Albert Rivera representa la seguridad de que el actual status quo no será desafiado y las grandes fortunas no tendrán por qué apretarse el cinturón para dejar atrás este invento llamado "crisis". En definitiva, el cambio o la posibilidad de un cambio real, frente a un recambio de algo que no funciona o funciona perfectamente pero sólo para unos cuantos.
Más allá de analizar punto por punto cada programa político (y deberías hacerlo sin duda alguna) ahí tienes las claves de qué nos jugamos en primer lugar el próximo 24 de mayo. Podemos y Pablo Iglesias podrían defraudarnos exactamente igual que PPSOE. Aunque parezca difícil, podrían hacer las cosas incluso peor. El poder corrompe y el dinero más si cabe, pero hasta entonces las buenas intenciones de base y el beneficio de la duda avalan su propuesta ante individuos como yo, un autónomo más de familia obrera. Llegó la hora de volver a humanizar la política y ponerla al servicio de la ciudadanía por delante de intereses personales y mercantiles. Llegó el momento, espero que del cambio y no del recambio. Pero en cualquier caso el próximo 24 de mayo vota. Por lo que más quieras y a quien quieras, pero vota.