Una de las imágenes más bonitas que procesionan en Vélez-Málaga, Ecce Homo
No me ha sorprendido ver que durante un tiempo #SemanaSanta ha sido trending topic en la red social Twitter, pero si me ha sorprendido que no haya sido porque todos los cofrades de mi ciudad natal, Vélez-Málaga, se hayan puesto a ‘tuitear’ sobre el asunto tras convocatoria previa del ayuntamiento (muy dado a los eventos fatuos y sobre todo a los de esta índole).
Espero que no se enfaden, si alguno me lee, pero es que si dependiera de ellos la celebración de la Semana Santa estarían todo el año con algún trono en la calle. De hecho, casi casi todos los meses hay un santo dando vueltas por el pueblo.
El asunto es, que la secretaria general de Podemos de Sevilla en una entrevista al periódico El Mundo, ha dicho, siempre según lo que he leído en el periódico en su edición digital, que serán los ciudadanos barra ciudadanas los que decidirían en el caso de que Podemos cuestionara la celebración de la Semana Santa.
A mi casi me da un síncope. En la vida me podría pensar que una sevillana conciba una Sevilla sin Semana Santa… Al final el periodista deportivo este que hace los vídeos en youtube va a tener razón… Hasta los cuestionados tuits de algún que otro jugador de fútbol quien, incluso, iba más allá y decía que hasta los langostinos nos van a quitar los de Podemos, van a tener algo de razón…
¡Dios mío! ¿En qué mundo vivimos? ¿Quienes son los banales? ¿Los políticos de Podemos por ocuparse de esas cuestiones tan baladís o los periodistas por plantearlas?
Si de verdad una licenciada en Derecho y funcionaria, que es incapaz de definirse ideológicamente, que califica de “trasversal” su discurso (un adjetivo que políticos de un partido y otro han utilizado hasta la saciedad para definir sus políticas y que yo todavía no tengo muy claro como darle significado) y cuyos cuatro ejes a desarrollar serán un plan anticorrupción, presupuestos participativos, auditoria ciudadana de la deuda municipal y un nuevo modelo de financiación local, me deja insatisfecha… Pues sí… Como cuando no se llega al orgasmo o como cuando el postre no está tan rico como se esperaba… Porque yo en más de diez años cubriendo noticias en ayuntamientos les aseguro que la canción es un remake de lo que hay. Eso sí aderezado con una estrategia de marketing que parece diseñada por Risto Mejide y unos temas de debate que con la realidad social y económica de España, a mi, al menos, me desilusiona cada día un poco más el fenómeno Podemos.