¡Ya no doy un paso más!¡No sé adónde voy, ni quiero ir allá donde me lleves!Le grito a la vida.
La figura pesada de la vidano se detiene,sigo adelante con esfuerzoenterrando oraciones a Dios.
Sin importarle a nadiemi canto quejumbrosode pájaro nocturnoescuálido se posaen medio del claro de Luna.
¡Ay!, de aquel, a quien,alguna vez,no le estorbe la vida.