DADNOS UN SUEÑO
Trabajamos allá abajo, en las profundidades, como en una mina.
Tenemos los ojos llenos de polvo de carbón. Nuestras manos se aferran
al pico y al burdo mango del martillo.
Dadnos un sueño luminoso que nos acompañe como una buena
hermana, que esté a nuestro lado en las tinieblas, que nos susurre
palabras vivas y que coloque su fresca mano en nuestras frentes.
Dadnos un sueño de un sol resplandeciente en la lejanía, de un viento
con olor a flores y a tierra mojada tras la lluvia, de árboles altísimos
que mecen sus hermosas copas, de hogares felices, de risas de niños
cuando se lavan por la mañana y cuando las últimas pelotas bailan
bajo las estrellas al atardecer.
Dadnos un sueño luminoso y nuestras manos seguirán agarrando
el pico y el burdo mango del martillo. Trabajamos allá abajo, en las
profundidades.
Necesitamos un sueño. Luminoso.
Artur Lundkvist.
Varios Autores. Poesía Nórdica. Ediciones de la Torre, 1999.
Traducción de Francisco J. Uriz.