PoioCop

Publicado el 03 noviembre 2014 por Cartas A 1985 @AntonCruces

¡Ay los policías municipales de Poio! ¿Qué pasa con ellos que salen a la palestra cada vez más a menudo?

Puede que todo haya sido un experimento científico/social de las altas esferas, un intento frustrado de conseguir al policía municipal perfecto: PoioCop. El Capitán América de las fuerzas de seguridad de Poio.

Durante el experimento algo debió salir mal y ahora lo pagamos todos. Visualizo al alcalde Luciano Sobral, pronuciese “Luchano” en esta versión, vestido con una bata blanca y unas gruesas gafas de laboratorio momentos antes de que el experimento fracasase.

PoioCop o Agente Poio ( como a él le gusta que le llamen) se ha desmandado y no hay quien le tosa.

Una fuerza de la naturaleza.

-“¡Señor, sí señor!” Es lo único que se sabe responder.

Puede que incluso existan varios individuos afectados por el programa The Poio Experiment.

Hagamos memoria: No hace mucho el primer (¿y único?) PoioCop se hartó a poner multas por girar el cuello “más de 45º”. Que digo yo que hay que ser un hacha para calcular eso a ojo de buen cubero y en movimiento. Ni Stephen Hawking. Ahora bien, no seré yo el que me meta con un agente con superpoderes.

A lo mejor es que el nuevo kit de poli trae la pipa, la placa y un medidor de ángulos. Como el saber no ocupa lugar hay que justificar el gasto.

Quizás simplemente fue, como dicen algunos, exceso de celo.

Exceso de celo.

Pues se debió de levantar aquella mañana con ganas de hacer el bien sin miramientos, ya que los agentes no multaron a uno o a dos conductores…qué va… trece conductores que entre todos giraron la cabeza 585 º algo así hay que multarlo sí o sí.

Da igual que estés poseída, si conduces así en Poio te vas al trullo fijo.

Al final las multas se retiraron y aquí todos felices.

Pero ahora PoioCop ha vuelto a la carga. 

Ya hay que tenerlos cuadrados. Después se corre la voz con estas jugadas de la mala fama de nustros policías, cuando en muchas ocasiones es inmerecida. Solo tenéis que ver películas para saber que: por cada poli bueno que existe, Jesucristo crea de su costilla un poli malo para que la balanza kármika esté equilibrada.

Por ejemplo, hay polis en más de un concello de los alrededores que aparcan en la zona de minúsvalidos. Es el famoso sistema “Olé, tus huevos”  ¿Es cierto o no? Mientras esto pasa, yo que sé, supongamos que en Marín, un policía local de los buenos te perdona una multa por ir “medio hablando por el móvil”.  Existen profesionales que ponderan la situación, que calibran sus actos y el impacto de la supuesta fechoría y después actúan en consecuencia. Todo eso en un segundo.  Quiero creer que los PoioCops son pocos y que estos los bueno, ganan por goleada.

Os dejo la única imagen que existe en la red de PoioCop en plena acción.

Salud hermanos.