Polenta al grill con tomates balsámicos y orégano. Receta de aperitivo

Por Recetasdetiaalia

La polenta es una elaboración tradicional italiana cuya base es la harina de maíz, generalmente de la harina de maíz gruesa o sémola de maíz. Hace años que la conozco, pero nunca he sido muy fan de ella hasta hace relativamente pocas semanas cuando decidí darle una nueva oportunidad y preparar esta polenta al grill con tomates balsámicos y orégano. Y no imagináis cómo me alegra haberlo hecho, porque me ha parecido un bocado fabuloso.
La polenta es un producto muy versátil que ofrece formas varias de preparación y servicio. Es bastante común prepararla con una consistencia más líquida, como de gachas, y comerla con cuchara, aunque también se puede hacer tan sólida como la he hecho para esta receta de polenta al grill con tomates balsámicos y orégano. Un bocado para el aperitivo con el que resulta muy fácil sorprender a los invitados.
¡Vamos con la receta!

Ingredientes para 12 unidades

Para la polenta: 250 ml de caldo de verduras, 125 g de polenta rápida, 25 g de queso Parmesano rallado, sal y pimienta negra molida. Para los tomates balsámicos: 10-12 tomates cherry, 1 cucharadita de ajo en polvo, 1 cucharada de vinagre balsámico, 1 cucharadita de azúcar moreno y aceite de oliva virgen extra. Para servir: 1 manojo de orégano fresco y 5 cucharadas de nata agria o crème frâische.

Elaboración


En una cacerola amplia, llevamos el caldo a ebullición, añadiendo una cucharadita de sal y un poco de pimienta. Agregamos la polenta junto con el queso Parmesano rallado y cocemos durante 5 minutos sin parar de mover. Retiramos del fuego, volcamos sobre una bandeja cuadrada y la extendemos con una espátula o el dorso de una cuchara. Cubrimos con papel film (tocando la polenta) y atemperamos. Trasladamos a la nevera donde dejamos que tome cuerpo durante una hora antes de desmoldar y cortar en cuadrados.
Mientras la polenta reposa en la nevera, lavamos los tomates y pinchamos cada uno un par de veces para que no exploten en el horno. Colocamos en una fuente apta para horno y espolvoreamos con el ajo en polvo y el azúcar moreno. Regamos con el vinagre balsámico y un chorrito de aceite de oliva virgen extra. Horneamos a 180ºC durante 20 minutos.
Cuando estemos listos para servir nuestro aperitivo, calentamos el grill a temperatura máxima. Pincelamos con aceite de oliva virgen extra cada porción de polenta y las marcamos durante 5 minutos por cada lado. Colocamos sobre cada una de ellas un tomate cherry, una quenelle de nata agria y una hoja de orégano fresco para servir inmediatamente.

Degustación


La polenta al grill con tomates balsámicos y orégano es un aperitivo diferente y divertido que, sin duda, sorprende a los invitados. No tiene gluten, así que es apta para celiacos. Dependiendo del tamaño que le demos, podemos comerla con los dedos y de un bocado y disfrutar de todos sus componentes juntos en la boca en una explosión de sabor maravillosa.